De Triunfos y Fracasos
Jair Torreblanca Patiño
A menos de 2 meses de que se lleven a cabo los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, las cosas para Tlaxcala comienzan a definirse en el tema de quiénes irán a esta competencia. En la prueba de maratón y a diferencia de otros ciclos Olímpicos donde se tenía presencia importante, en esta ocasión no habrá maratonista que defienda los colores de la entidad.
Atrás quedaron los tiempos donde se asistía al menos con 3 corredores dos mujeres y un hombre, la última vez que sucedió esto fue Atenas 2004 donde acudió Francisco Bautista, Karina Pérez así como Madaí Pérez, esta última corredora luchó en dos justas europeas sin éxito alguno para dar la marca necesaria y asistir a estos juegos, los que significarían la tan ansiados despedida con broche de oro, esta se quedó solo en deseo.
Hoy la única esperanza se cierne en deportes convencionales, está en la marcha, donde hace muchos años tuviéramos representantes con calidad en los hermanos Palacios, Tito y Victoria. Hoy tocará el turno al marchista Jorge Martínez Báez oriundo Del Carmen Aztama en Teolocholco que se jugará la última carta del andarín que ha tenido una carrera en ascenso, ahora el mando de experimentado Raúl González.
En este andar, las enseñanzas han comenzado a tener frutos en los diferentes circuitos donde se ha presentado, tanto justas panamericanas o circuitos internacionales de marcha y en esta ocasión, el próximo mes estará disputando el último boleto para Tlaxcala dentro de las clasificaciones a la justa olímpica. Qué se puede esperar de este marchista, sin duda que, pueda trascender y sobre todo aprovechar la gran oportunidad de concretar un objetivo, no será fácil pero ojalá la experiencia de podios que ha obtenido sean la catapulta para lograr concretar la meta.
Deseamos desde estas líneas a Jorge, que tenga el éxito y ojalá pueda coronar esa carrera y el deseo de asistir a sus primeros Juegos Olímpicos, algo que ha marcado desde hace muchos años, sí, desde que comenzara en Olimpiada Nacional donde fuera medallista, posteriormente destacó como juvenil y posteriormente al involucrarse con experimentados andarines, ha comenzado a tener el conocimiento y sobre todo conocer de la experiencia que ellos tienen en sus carretas.
Qué decir de su principal mentor: Raúl González medallista olímpico, funcionario público deportivo y que bajo el proyecto de formar un grupo de entrenamiento, ha llevado a varios jóvenes a tener carreras destacadas y ojalá sea el turno del joven tlaxcalteca y todos los años invertidos le den los frutos esperados y este 2021 sea su año para que lo veamos debutar en esta competencia. Por lo pronto se espera que el próximo mes, sean de buenas noticias y lo que sucede dentro de esta participación le de el tan ansiado boleto para Tokio 2020.
En esta ocasión dentro de los juegos Paralímpicos se tendrá una sola representación: Leonardo de Jesús Pérez Juárez, oriundo de Xaltocan y que se espera pueda tener importante presencia, es cierto en las últimas competencias y después de la medalla que obtuviera de bronce en Londres 2014, ha tenido participaciones con altibajos donde le ha costado estar dentro de los tres primeros lugares, al encontrarse con corredores Japoneses y de Estados Unidos que lo han relegado de podio.
En la participación nipona que tenga, la esperanza de obtener medalla está, pero también hay una realidad que los ha puesto en desventaja en todas sus participaciones, al enfrentarse a ellos con la fuerza de una sola mano debido a la lesión que tiene, sus rivales lo hacen con dos manos y esto ha dificultado que mejore los tiempos, al tener doble esfuerzo cada ocasión que se sube así silla de ruedas. Pese a ello ha demostrado que la fuerza, el orgullo tlaxcalteca y sobre todo la fuerza que pone en la pista, lo pueden llevar a lo más alto.
Hasta aquí, la participación de Tlaxcala para estos juegos, para muchos, esto refleja lo que se ha dejado de hacer por parte de las autoridades, pero esto va más allá, no hay base de desarrollo para generar atletas con talento, Hoy solo se tienen entrenadores que cumplen con un trabajo que está alejado de la calidad, pocos deportistas en sus centros de desarrollo y por ende baja el espectro de talentos. Atrás quedaron los garbanzos de a libra que se volvieron los salvadores de estos entrenadores al justificar su labor por el simple hecho de las medallas que ellos daban.
Al salirse ellos, se evidenció que no había base de trabajo y que por art de magia, llegó la realidad de no tener a quien tomara la estafeta para mantener los buenos resultados. Esta situación explica el porque se está en estos momentos carentes de más atletas elite con calidad de representación nacional y se continúa bajo una inercia tóxica que no ha dejado beneficios durante los últimos 15 años. La muestra está en la baja de medallas que se ha dado en las participaciones nacionales y la falta de continuidad de los juveniles a sub 23 y elite.
Es obvio que no hay un plan de desarrollo, primero de masividad y posteriormente con ya detección de talentos eficaz, actualmente, todo se centra al trabajo que hagan los diferentes centros de desarrollo entrenamiento, que no cuentan con una proyección a futuro, que encamine a los corredores a vida deportiva prolífica que en cuatro años los encamine a la antesala de unos Juegos Olímpicos. Por eso llama la atención las diversas voces que surgen en tiempos electorales y que compran los que no los conocen, porque en la práctica poco o nada, han contribuido al desarrollo deportivo estatal, pero ahora sí desde una trinchera política salen como los salvadores del deporte estatal.
Justificar el conocer el ámbito deportivo estatal por el simple hecho de haber sido atleta o entrenar, no es garantía de un buen desempeño, al recordar que su única justificante para no desarrollar el trabajo, es la falta de apoyo económico. Recordar que en el sexenio de Héctor Ortiz con Eugenio Romero como director, hubo los recursos, pero los resultados no fueron acordes a la inversión. Sin duda el problema está en la mala ejecución de los entrenamientos, una falta de análisis del trabajo efectuado por está planta laboral, que haga quitar a quien no es eficiente y solo así, se tendría una mejora en resultados. Pero estamos en tiempos electorales y las criticas son las mejores soluciones para problemas que tienen otro fondo ¿O no?
Comentarios para esta columna que no irá a Tokio al correo detriunfosyfracasos@hotmail.com
