Esta conmemoración se decretó en el año 2010, durante la Cumbre del Tigre que tuvo lugar en Rusia, a causa del año del tigre de acuerdo con la cultura china, el entonces primer ministro de Rusia Vladimir Putin (actualmente presidente) fue el responsable de impulsar esta iniciativa.
Para celebrar esta cumbre se reunieron 13 lideres de países que aún cuentan con tigres en estado de libertad, entre los países que firmaron el pacto cumbre se encuentran: Bután, Bangladesh. China, India, Indonesia, Camboya, Malasia, Laos, Myanmar, Nepal, Vietnam, Tailandia y Rusia.
A pesar del corto tiempo de ejecución de la iniciativa para el 2016 se reveló que la población mundial de tigres tuvo un incremento, pasando de 3,200 especímenes a 3, 890 en seis años lo cual representa un impacto favorable para los ecosistemas en general.
Esta especie se encuentra amenazada en gran medida por las actividades humanas como el tráfico ilegal para su uso medicinal en países como China, el uso de su piel en decoraciones y prendas, la perdida de su hábitat por el desarrollo urbano y los conflictos de pastoreo.
Se estima que a causa de lo expuesto con anterioridad, la población de esta especie se vio reducida aproximadamente en un 97% durante el ultimo siglo, lo cual enfatiza la importancia de las medidas que se han tomado para protegerlos.
Actualmente se tiene una mayor conciencia de que ningún plan de protección a los tigres es viable si no se educa a quienes los tienen como vecinos, para tomar medidas que los alejen de los lugares donde habitan en vez de matarlos, haciéndoles saber que a pesar de que sus tradiciones ancestrales en medicina tienen un gran peso cultural e histórico, carecen de algún fundamento científico y en la actualidad tendrán muchos más beneficios si protegen a una especie como los tigres que son fundamentales para el equilibrio natural.