Ángel Díaz Barriga, investigador y docente de la Universidad Autónoma de Tlaxcala destacó que las universidades y las instituciones educativas no aprovecharon los 16 meses de pandemia para reflexionar sobre los verdaderos deberes educativos.
Durante el curso de capacitación a docentes Díaz Barriga, consideró que durante la pandemia las autoridades estatales y federales no ajustaron los planes de estudio, no hubo una evaluación formativa, la línea de una educación no fue formal, no se repensó en cómo trabajar con los alumnos a través de una pantalla.
Expresó que el sistema educativo tiene que reconstruirse, cumplir con la nueva escuela mexicana y esta tiene que ser fundamentada en documentos, plantear rasgos que sean funcionales y no solo teoría.
Además, asimiló que el denominado programa aprende en casa fue un gasto innecesario: “Durante las clases en línea la SEP exhortó a los docentes a no reprobar, pero cómo reprobar si no todos los alumnos estaban bajo la misma línea de aprendizaje”, puntualizó, Ángel Díaz Barriga.
Solicitó cambios en la educación y uno de los primordiales que el reflexionó es ver al docente como persona y no como autoridad, saber que tiene que sembrar interés en los alumnos para el desarrollo de sus aprendizajes.
Recalcó que durante todo el tiempo de confinamiento el decir que los alumnos no aprendieron es una mentira: “Ellos estuvieron en el campo donde se cosecha, estuvieron en mercados, en ventas, colaborando en casa, en tareas del hogar, los estudiantes aprendieron aprendizajes cotidianos”.
