Por: José Luis Parra Gutiérrez
Quiero seas tu… el amor único
no revelado y misterioso.
No maltrecho
a la medianoche en tu sueño ni hasta el mediodía con el sol
sentenciado por la inevitabilidad.
Quiero con cada respiro tuyo ternura.
Quiero ser la cura y el veneno
en tu cada amanecer y atardecer.
Incluso como hombre libre
en tu vida, ser la última mujer…
Aleksandrovna Ageeva.
Traduccion, Pablo Hughes Reyes (Uruguay 1946).
GRACIAS a la profesora Natalia A. Ageeda, por encendernos el foco rojo sobre este asunto, omitido en la prensa de México; convirtiéndolo en asunto de especialistas…?!
UNOS 50,000 CAMIONEROS CANADIENSES, DEL “CONVOY DE LA LIBERTAD” RECHAZARON LAS RESTRICCIONES DEL COVID-19 (Alfredo Jalife-Rahme/Pablo Hughes).
La revuelta de camioneros propietarios en Canadá (país, miembro de la OTAN, del Comando Norte/NORAD y del geoeconómico T-MEC) tiene un fuerte impacto en su frontera con EUA.
Se abre una feroz lucha, por un lado, Fox News, Tucker Carlson (TC), el expresidente Donald Trump, Elon Musk (el nuevo mas rico), y el primer ministro de Hungría, Viktor Orban y, por el otro lado, el megaespeculador George Soros.
Trump, anunció que apoya en toda su ruta a los camioneros canadienses, mientras, el primer Justin Trudeau, abandonó la capital Ottawa con su familia a un lugar desconocido bajo el pretexto de haber contraído covid-19.
En el “convoy de la libertad” brilló la frase: “Hacer a Canadá grande de nuevo” como parte del “wokenismo” (despertar; stay awoke: estar alerta…!), que le ha valido a Canadá su apodo de wokestán, donde surgió lo inesperado: un convoy de la libertad de 50 mil camioneros que protestan contra las medidas restrictivas del covid-19, las cuales han sitiado a Ottawa y a su Parlamento, además de poner en problemas al primer ministro de Canadá: dizque un país pacifista doméstico adentro y simultáneamente bélico foráneo como miembro de la OTAN, donde estimula la confrontación en Ucrania contra Rusia.
El fondo creado para subsidiar a los camioneros (GoFundMe) ha alcanzado $10 millones de dólares cuyo origen procede en su mayoría de agrupaciones trumpianas de Estados Unidos que los financian generosamente.
Elon Musk apoyó sin tapujos a los camioneros que formaron un poderoso convoy de 3,300 kms (equivalente a la frontera MX-EUA) desde el Pacífico, hasta la capital Ottawa (Ontario).
Musk sentenció por tuit que los camioneros canadienses gobiernan, mientras el temeroso premier Justin Trudeau los despreció racistamente como una minoría marginal, no importante.
La revuelta alcanzó al primer ministro de Hungría, Viktor Orban, y a Rusia, cuando el periodista de Fox News, desnudó el “control secreto” de George Soros sobre Hungría con sus multimedia globalistas.
Fox News, acusó a Soros de atacar y ser un enemigo de la civilización occidental cuando entrevistó al primer húngaro Viktor Orban –que, por cierto, se acaba de reunir con el zar Vlady Putin en el Kremlin para desactivar el lío de Ucrania–, denunciando las tendencias globalistas de Soros, personaje que agrupa todo aquello que odian los húngaros.
Por otro lado la mentirosa CBC (radio televisión de Canadá) difundió la teoría de conspiración con actores rusos que se encuentran detrás de la revuelta.
Los activos camioneros en pleno invierno son propietarios de sus camiones y ya, desde el 15 de enero habían sido amenazados de ser vacunados para poder atravesar la frontera de la provincia de Canadá, con Estados Unidos.
La situación política se le ha complicado a Trudeau cuando el opositor Partido Conservador le exhorta a encontrar una solución política e iniciar el diálogo porque los camioneros son apasionados, patriotas y pacíficos, por lo que merecen ser escuchados con respeto.
Estamos en espera de las acciones de Trudeau, amigo de Soros, ya que es su responsabilidad aportar soluciones y quien no tuvo la inteligencia política para atender este asunto y ahora busca además, intervenir equivocadamente, con la fuerza militar internacional de la OTAN apoyado por el especulador intervencionista globalista George Soros en una guerra contra Rusia (Vk: alfredojalifeoficial).
Para México, finalmente, reflexionemos. Cada decisión es un acto político: para distribuir o concentrar la riqueza; a favor de la corrupción, las elites y depredación o, a favor del bienestar familiar y la cooperación para la competitividad; detener o acelerar el daño a la ecología y enfermedades para las familias.
Las transnacionales y otras instituciones locales tienen dueños “invisibles” que actúan desde el anonimato agrediendo cobardemente a los “desobedientes” que se niegan a ser súbditos y recibir salarios insuficientes o desempleo; elites que hay que denunciar por corrupción, iniquidad, crímenes de economía y otros delitos contra la humanidad.
Por lo anterior lo invitamos a participar en la alianza de Consumidores con las economías locales para distribuir la producción, el comercio y la riqueza para recuperar nuestra libertad con menos pereza y cobardía. Recuerde, somos lo que hacemos y decimos; dejamos de hacer y callamos…
“Ciencia es independencia para la democracia en la historia, educación y la economía”. Tlapancalco/Metepec, Tlaxcala. México.
