Por: El Psicólogo Carlos Muñoz

Estoy un 90% seguro de que en algún momento en alguna plática casual alguien dijo algo que chocó con alguna de tus ideologías políticas, religiosas o familiares, y ahí es donde todo comenzó, ya que empezaste a sentir que tu interlocutor tenía algo personal contra ti y por ello tu actitud hacia el también cambió, sin embargo, la otra persona no tenía ni idea que hace un par de días acababas de terminar con tu pareja porque descubriste que te estaba poniendo el cuerno con tu mejor amig@, y por eso soltó ese chiste de infidelidad, por poner un ejemplo.

O bien que creas que en tu centro de trabajo a todos les caes mal y solo buscan hacerte la vida imposible, hasta piensas cómo se deben de estar poniendo de acuerdo para que cuando tú llegues todos se empiecen a burlar y secretear al mismo tiempo de ti, imaginas las formas en las que les vas a contestar cuando hagan algún comentario sobre tu cabello o la ropa que llevas puesta ese día, y en tu mente todo eso tiene sentido, ¿y te digo algo?, esa es la función de nuestro cerebro, encontrar el sentido a todas las cosas, y si no existe alguno, lo crea, sino cómo creen que surgen las pseudociencias, pero eso será… para otra columna.

A lo que quiero llegar con esta breve introducción es qué, día con día estamos y estaremos expuestos por lo que nos queda de vida a la crítica y el cotilleo, esta, también es una característica natural del ser humano, el ser social, y una vez que nos encontramos interactuando con nuestros similares, no podemos evitar comenzar a hablar de la vida de los demás, que si ya tiene carro nuevo, que si el que trae ya está viejo, que si le “pega” el novio, que si encontró nuevo trabajo, que si lo engañaron, que si esto y que si el otro, y al final se concluye con un: “pero pues cada quién su vida, quiénes somos nosotros para juzgar”

Y aunque esto de la interacción social sea algo natural, la crítica no lo es, eso sí, es una conducta aprendida y de la cual puedes decidir o no el participar, pero bueno, de eso no venimos a hablar, lo que a nosotros nos debería interesar es, ¿Cómo le hago para que esto que pasa a mi alrededor no me afecte?, probablemente de esto ya haya hablado anteriormente (obvio ya hablé de esto anteriormente, lo hago cada que puedo) y es qué, no existen formulas mágicas, ni recetas, tips o consejos que apliquen igual para todo el mundo, yo solo me limito a dejar generalidades sobre la mesa y ya cada quien toma lo que crea que le pueda funcionar y lo que no lo puede desechar, es cierto que si algo de lo que lees te hace un poco de ruido, lo normal sería que busques ir más a fondo en este camino de autoconocimiento que parece nunca terminar.

Si te preguntara cuál es el individuo del que más conoces, a reserva de que contestes algo que carezca de sentido, lo más probable es que la respuesta sea que tú eres esa persona, ahí está la razón principal de por qué nos ofendemos hasta por el más mínimo detalle (no aplica igual para todos), lo que quiero decir es qué, pasamos tanto tiempo con nosotros mismos, que creemos que los únicos problemas que realmente son importantes, son los nuestros, los exageramos y al mismo tiempo minimizamos el dolor ajeno, esto mezclado con la sensación de querer ser el centro de atención, hace que suframos en gran medida.

Aclaro nuevamente, no todo el mundo es igual, sin embargo, las personas que toman las cosas personales, aún cuando ni directamente se las hayan dicho o hecho a ellos, comparten un rasgo principal, que es la baja autoestima, debido a ello todo les afecta más, y las respuestas ante este estímulo pueden tener diversas vertientes, tanto hay personas que puedan enojarse, reprimir sus emociones y aislarse para evitar estar en el ojo público, como las que no se quedan calladas y contestan con más agresión.

Es claro que una ofensa o una crítica realizada de manera directa le va afectar a cualquier persona, no es como que esté diciendo que no tendrías que hacer nada, porque también el saber marcar límites de manera clara y oportuna te podrá evitar muchos problemas, lo que queremos saber es ¿qué hacer para no tomar todo tan personal?

En psicología existen diversos enfoques terapéuticos y cada uno de ellos cuenta con técnicas, que bien aplicadas son muy eficaces para corregir algunas conductas, no puedo hablar mucho de ello, ya que no manejo todos los enfoques y tampoco puedo recomendarte alguna técnica, porque al hacerlo sin conocerte, estaría cayendo en la pseudociencia, ¿ya viste como es bien fácil perder el camino?

Para cerrar me gustaría mencionar algo que casi nadie dice con respecto a lo que crees que piensan de ti y es que, nadie se fija tanto en tu vida como tú crees que lo hacen, todos tienen suficientes problemas como para concentrarse en los ajenos, por lo menos no todo el tiempo, así que intenta no hacerlo todo tan personal y si crees que no es así, podría ser una buena señal para visitar a un Psicólogo, bueno esa es mi opinión, recuerda que puedo estar equivocado.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here