Por: Víctor Gálvez
Existen muchas formas de ganar el dinero y también existen muchas formas de multiplicarlo, sin embargo, hay ser muy cuidadosos al tratar de hacer crecer el patrimonio y no cometer errores que pueden costar mucho dinero. Para esto es muy importante aprender a decir no a varias situaciones que se viven a diario y que se piensa que son cosas muy simples, pero a su vez muy peligrosas:
Debes aprender a decir no a:
A las tandas. Si bien es una manera muy simple de ahorrar y de interactuar con conocidos, es muy importante que con quien hagas las tandas sean personas muy confiables, ya que este ahorro que por lo menos implica un grupo de 5 personas, no está protegido por ningún ente financiero, es decir, si se van con el dinero ya no habrá forma de recuperarlo.
A prestar dinero. De la misma manera que las tandas, debes prestar a quien tengas mucha confianza y que sepas que te va a devolver ese dinero. Generalmente cuando prestas a familiares y amigos, ya no regresa el dinero y pierdes la amistad o el familiar se molesta contigo.
A ser aval. Uno de los peores errores que puedes tener. Ser aval implica que en caso de que la otra persona no pague el crédito que solicitó, sea el aval quien responda al 100% con la deuda. Así que mucho cuidado con ser aval.
A los vendedores. Los vendedores están por todos lados y te venden de todo. Existen vendedores muy hábiles que te venden hasta piedras. Ten mucho cuidado con ellos y cuando les compres, analiza si lo que compras realmente te hace falta.
A quedar bien. Sucede cuando tratas de ser esplendido con tus familiares o amigos y “disparas” diferentes tipos de bebidas o comida. Al final tus amigos y/o familiares degustarán lo que les ofrezcas, pero quien se quedará sin dinero serás tú.
A lo que no te alcanza. No compres cosas que están fuera de tu alcance. Sé que mucha gente desea con todo su corazón algún bien material. No es imposible adquirirlo, sin embargo hay que hacerlo con mucha planeación y disciplina. No te avientes como “el borras” y compres cosas que están fuera de tus posibilidades, al menos por el momento.
A ofertas inútiles. Muchas veces las ofertas son productos que se venden muy poco o que y están a punto de caducar. Obviamente estas ofertas son tentadoras y tienen cierto grado de marketing de impulso; es decir que inducen a comprar ese artículo, aunque no lo utilices realmente. Ten mucho cuidado con estas ofertas.
A lo que no necesitas. No compres por comprar. Analiza y estudia si estos productos te hacen falta y su costo vale la pena para cubrir alguna necesidad o resolver algún problema. Si no cubre una necesidad o no resuelve dicho problema, no es necesario que lo adquieras.
A la deuda innecesaria. Plataformas de streaming, plataformas de música, aplicaciones, aparatos para hacer ejercicio, suscripciones a revistas, etcétera. Analiza que te sirve y adquiérelo. No compres deudas innecesarias
Al miedo a invertir. Invierte. No tengas miedo. Mi recomendación es que te acerques con expertos que te orienten a cómo y dónde invertir mejor tu dinero. ¿Puede ser un gasto al cubrir sus honorarios’, la respuesta es sí, sin embargo ganarás más invirtiendo adecuadamente.
A la desinformación. La información es poder. Siempre mantente informado sobre tasas de interés, sobre las tendencias del mercado, sobre las tendencias de consumo, etcétera. Esta información te ayudará a aprovechar de mejor manera las oportunidades de negocio que el mercado te pueda ofrecer.
Aprender a decir no es algo indispensable en la vida diaria. El miedo o la pena a decir no muchas veces nos paraliza y nos hace decir sí a algo que no queremos y que económicamente puede afectar a nuestros bolsillos. Aprende a decir no y no compres problemas o deudas que pueden pegarle a tu patrimonio.
La siguiente semana no te pierdas de más consejos acerca de “Sugerencias para diversificar tu ingreso” Y por último quiero que recuerdes que no importa dónde y cómo te encuentres hoy, siempre es buen momento para comenzar con finanzas saludables…
