Las estimaciones de enero a junio de este año en territorio mexicano se reportaron 488 relacionados con la explotación sexual, desafortunadamente en un 34 por ciento de los casos se ven involucrados menores de edad, lo cual representa a cerca de 213 individuos entre los 0 a 17 años.
El 2022 fue considerado el segundo año más afectado por este delito ya que se registraron 913 víctimas de esta modalidad de explotación siendo superado únicamente por el 2015 que registro mil 171 casos.
Los comparativos a nivel mundial respecto a la explotación sexual y mendicidad colocan a México en el tercer lugar a escala global cuando se trata de menores de edad; solo después de Tailandia y Camboya.
Las personas que cometen este delito aprovechan la corta edad de las víctimas, la paternidad negligente que se ejerce sobre ellos, así como otros factores entre los que se encuentran la pobreza extrema, la falta de educación, desastres naturales, guerras y otras circunstancias para sustraer a los infantes.
Este delito es tan antiguo como la humanidad misma, sin embargo los intentos para combatirlo se registran el 23 de septiembre 1913 cuando se promulgó la primera ley contra la prostitución infantil en Argentina denominada “Ley Palacios” ya que fue redactada e impulsada por el diputado Alfredo Palacios.
Es hasta el año de 1999 como resultado de la Conferencia Mundial contra el Trafico de Personas se proclamó que cada 23 de septiembre se conmemorara el Día Mundial contra la Explotación Sexual y Trata de Personas.