Por Victor Gálvez
Está muy difundida la idea de que se necesita mucho dinero para poder ahorrar y que solo las personas con grandes ingresos pueden darse el lujo de guardar un extra para cumplir una meta que los haga felices. Sin embargo, la experiencia demuestra que ahorrar es un hábito que va más allá de las posibilidades financieras y que los mitos más comunes sobre el ahorro se pueden identificar y desmentir con facilidad.
Lograr el hábito de ahorro tiene que ver más con conocer las propias finanzas personales y ser disciplinado. Uno mismo conoce cuánto es su ingreso mensual. A ese monto se le deben reducir los gastos por necesidades básicas y luego llevar la cuenta de lo que se gasta en cosas que no son necesarias en el mes. Sabiendo este último monto, uno puede ser capaz de reducir esos gastos y convertirlos en ahorro, independientemente de lo que se reciba como ingreso mensual.
Entre los principales mitos están:
Dejar de comprar lo que me gusta. No necesariamente se tiene que hacer esto. Solo debes modificar un poco tus hábitos de consumo y si compras lo que más te gusta de una manera continua; cambia la compra a un plazo más largo.
Dejar de divertirme. El entretenimiento es algo primordial en la vida de las personas. Mi sugerencia es que pienses en maneras más económicas de divertirte. Por ejemplo si te gusta mucho el cine, cambia una ida al cine por una buena película desde casa.
Guardar enormes cantidades en el banco. Es uno de los mitos más grandes sobre el ahorro. Puedes comenzar a ahorrar desde 100 pesos en algunas cuentas de banco.
Vivir limitado. Noooooo. Lo recomendable es ahorrar el 10% de tus ingresos. Si esto te limita, puedes comenzar con un 5% e ir subiendo el porcentaje poco a poco. Recuerda que el ritmo hace el hábito.
Ser avaro. Para poder ahorrar no necesariamente significa que tengas que privarte de muchas cosas o que dejes de compartir momentos especiales con tus seres queridos. Se trata de ser estratega para gastar. Por ejemplo si tienen pensado comer hamburguesas, probablemente sea más divertido y funcional hacer las hamburguesas en casa cuando la reunión es de un grupo grande de amigos.
Sacrificio. Más bien cambiaría la palabra sacrificio por disciplina. Si no eres disciplinado, difícilmente vas a poder ahorrar.
Tener millones en el banco. Otro mito grande sobre el ahorro. Para ahorrar no se requiere hacerlo en grandes cantidades o bien ser un intelectual de las inversiones. Basta con que tengas fuerza de voluntad y te asesores de un experto (en un banco) que te oriente sobre las formas de ahorro y la manera en que puedas lograr que tu dinero crezca.
Algo inmediato. Puedes planear tus ahorros de tal manera que no te afecten de manera inmediata en tus finanzas personales. Es importante que empieces a planear ya, aunque tu ahorro comience en un corto plazo
Pensar todo el día en el dinero. No. Debes dejar que las cosas fluyan y canalizar tus emociones en todo aquello que te haga mejor persona. Dedica solo un pequeño espacio a tratar tus finanzas personales y con esto será más que suficiente.
Vivir para trabajar. Lo correcto tendría que ser trabajar para vivir. No todo en la vida es trabajo y ahorrar no implica que trabajes más. Implica disciplina, dedicación, esfuerzo, planeación, orden, etcétera.
Espero que esta información te sea útil a la hora que te decidas comenzar a ahorrar.
La siguiente semana hablaré acerca de “Retos para tus finanzas personales”
Y por último quiero que recuerdes que no importa dónde y cómo te encuentres hoy, siempre es buen momento para comenzar con finanzas saludables…
