En época invernal aumentan los casos de influenza y otras infecciones respiratorias agudas a causa de virus y bacterias; en general, son más vulnerables niñas y niños, personas adultas mayores y quienes viven con comorbilidades.
Desde el inicio de la temporada invernal en octubre y hasta el 28 de diciembre del 2023, las 464 unidades de salud monitoras de enfermedad respiratoria viral (Usmer) distribuidas en todo el país, confirmaron cuatro mil 043 casos positivos de influenza y 94 decesos por esta causa.
La influenza es de origen vírico, aguda y muy contagiosa. Se trasmite de persona a persona, principalmente por medio de aerosoles que contienen virus y que se dispersan cuando un individuo enfermo tose o estornuda.
Los grupos de edad más afectados en orden descendente son mayores de 65 y el de 5 a 9 años, seguido del de 30 a 34 años. La mediana de edad es 36 años. En la distribución por sexo, 57 por ciento son mujeres.
La influenza se caracteriza por fiebre, escalofríos, tos, dolor de garganta, mucosidad nasal o nariz tapada, dolores musculares, corporales y de cabeza; fatiga (cansancio) y algunas personas pueden tener vómitos y diarrea, aunque estos últimos síntomas son más comunes en niños y niñas.
La Secretaría de Salud recomienda que deben acudir a recibir la vacuna quienes tienen factores de riesgo de desarrollar enfermedad grave, es decir, las personas que viven con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), obesidad, diabetes, enfermedades pulmonares crónicas, del corazón o cáncer.