Por: Jair Torreblanca Patiño
El deporte municipal, area castigada administración tras administración, tendrá en este 2024, el peor de sus años. La razón así de simple, al tratarse de año electoral todas las baterías estarán referidas a posicionar a los suspirantes a candidatos (as) que a través de la promesa vacía tratarán de ganar adeptos, prometiendo las perlas de la Virgen, bien dice el dicho de que prometer no empobrece y eso lo aprenden muy bien que en cada visita a los centros deportivos se despliega todo el verbo sobre lo que hace falta y no se ha logrado cumplir.
Lo triste de esta historia que conocemos proceso tras proceso, se repite y solo cambia de color de partido. Es por ello que las omisiones que se tuvieron en este rubro seguirán y pedir que se mejore sin duda es una carta a los reyes que no encontrará eco positivo para las carencias que se tienen en este sentido, sobre todo al tratarse de los principales propulsores de la actividad deportiva en cada una de las comunas. Esta promoción nunca ha existido y solo se dice cumplir por el simple hecho de poner en marcha alguna liga municipal y solo contribuir con la compra de los trofeos.
¿Que falta? Poner en marcha un proyecto magno que haga a los ayuntamientos tener la obligación de desarrollar el deporte como una necesidad hacia la población para que destierre todos males ocasionados por las malas conductas alimentarias y de ejercicio. Hoy más que nunca se requiere de promover el deporte de forma popular con el fin de tener una comunidad activa y no sumida en el sedentarismo. Es cierto faltan planes dictados desde la autoridad deportiva que haga contagiar de está necesidad de forma masiva y no solo en pequeños grupos con los que se presume cumplir con la función.
¿Dónde estás las alternativas surgidas desde el seno del Idet? No se tienen, sobre todo porque el trabajo coordinado con las direcciones del deporte en los municipios está marcada para ir en dirección solo de ser convocados a reuniones, presentar programas que al final no tienen el objetivo de forjar actividades constantes y continuas con el fin de lograr el objetivo de ser un paleativo hacia el sedentarismo, mal que a raíz de la pandemia se recrudecieron y al momento no se ha tenido un cuidado especial para el fomento del deporte como principal solución.
Es bien sabido que por decreto incluido en la ley del deporte de Tlaxcala está la obligación de las autoridades municipales el otorgar un recurso a esta área. La realidad es otra y tiene a estas direcciones sumidas en la inoperancia al tener en primera en estas áreas a personas producto del pago de favores al apoyar la respectiva campaña y por ende, sin algun presupuesto asignado. Lo peor es que tampoco hay trabajo de conseguir esos recursos por otras vías por parte de los mismos directores del deporte que solo ven el puesto como simple pago a su trabajo electoral. Así no se puede hablar de desarrollo.
Pocos municipios han entendido la necesidad de tener espacios dedicados a la preparación de los nuevos deportistas, con el fin de ser el estandarte del propio municipio y así representar dignamente a la comuna y ser ejemplos a seguir por las nuevas generaciones. Pocos lo han entendido de esta forma, como los casos de Apizaco, San Pablo del Monte, Huamantla y Chiautempan que al menos tienen en sus unidades deportivas centros de desarrollo que promueven el deporte desde la enseñanza y no solo a través de ligas organizadas que al final solo son lugares para la práctica de lo aprendido.
Es por ello que hace falta el trabajo gubernamental a fin de promover que en cada ayuntamiento se tuviera al menos tres escuelas deportivas. Con este panorama tendríamos al menos 180 centros de desarrollo y dadores de nuevos valores en el deporte. Sin duda le ahorrarían al Instituto del Deporte un paso que al momento no lo tienen contemplado en algun plan de crecimiento que de como resultado el trabajo masivo, base de todo desarrollo deportivo y que no se necesita ser experto para saberlo.
Ante estás omisiones, es incongruente pedir que haya avance cualitativo en el desempeño de nuestro deportistas. Lo vemos en los resultados obtenidos, donde no se ha logrado mostrar avance que haga presumir acciones válidas para lograrlo, solo la inercia que se tiene de trabajos de administraciones pasadas es lo que actualmente mueve el deporte actual, es por ello que el recuperar lo perdido se ha presumido en exceso como logró y no como una obligación innerente a la función que desempeñan, la cual han llenado con demasía burocracia y tener de forma sorprendente un metodologo para cada deporte.
Al final este trabajo por separado entre autoridades deportivas de los municipios y el estado, generan que no se tengan acciones en conjunto como el hecho de tener espacios deportivos sin usarse, sin capacitaciones y dejar está responsabilidad solo a los ayuntamientos que al no tener el interés de promover este rubro, simplemente no hay el trabajo esperado de tener un estado deportivo, como se presume en discursos. Porque recordemos que traer un evento deportivo internacional no es apoyar el deporte., como se ha querido mostrar. Ojalá en este año allá anuncios de apoyos con recursos para los que actualmente hacen deporte.
POA
Espero con ansia la presentación del Programa Operativo Anual, sobre todo para corroborar que las acciones escritas en este plan magno, serán las mismas que se dieron el año pasado y antepasado, solo vestidas de una forma diferente para hacer creer a la opinión pública que hubo innovación hacia los planes que nos hemos chutado ya en dos años sin resultados palpables. Porque sería preocupante que para hacer creer que se ha cumplido se maquillatsb las cifras de beneficiados o asistentes a cada actividad que vemos en imágenes, presencias muy distantes de lo que se ve a lo que realmente fue.
La noticia esperada es tener semana a semana actividades en los diferentes municipios y no solo cinco al año como si con esto se quisieranjusuticar un salario el cual dista mucho de los resultados que realmente se han dado en la promoción deportiva a través de la activación física. Ojalá que los reyes magos lean está carta de necesidades y pueda hacer que haya más trabajo de promoción, nunca será tarde para comenzar y callar bocas que en dos años no se ha logrado, porque al final nos han presentado más de los mismo y eso no es descubrir el hilo negro, solo tratarlo de hacer ver de otro material.
Por fin
La malaria que arrastraron los coyotes de Tlaxcala en la temporada pasada termino. Se logró al obtener el triunfo ante Cancún, el actual campeón, que por la mínima les ganaron y sumaron los tres primeros triunfos. Lo que ha venido a raíz de esta victoria es lo que vemos en los medios, una ola triunfalista que hace generar planes inverosímiles como llevar los partidos a proyectarse en un cine. Haber, los pasos se deben de dar basado en la lógica que estipular el camino a seguir en la Liga de Expansión. Recordar que este plan se dio en el torneo antepasado donde el ingresar a la liguilla y tener llenos en el estadio, hacía pensar en tener alternativas para que los aficionados pudieran ver lo partidos, ahora es muy prematuro, sobre todo porque el primer objetivo es devolver la credibilidad y hacer que la gente regrese al estadio. ¿O no?
Comentarios para está columna que no hará tamales al correo detriunfosyfracasoss@gmail.com.
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