Tlx. Mx. 19 agt 2024
Por: José Luis Parra Gutiérrez
Bajo el régimen de la globalización cristiano capitalista,
los países desarrollados están “comprando” tierras y agua
en otros pueblos
sin importar el futuro de la nación dueña originaria de los recursos.
El poder del dinero sigue siendo un problema para el humanismo;
problema que no ha resuelto ninguna religión ni dios.
¿Habrá algún dios omnipresente, sapiente y omnipotente,
para resolver esta depredación desde más de 2000 años…?
No, lo ha habido ni lo habrá.
Así. El neocolonialismo cristiano capitalista
sigue incitando a los países ricos a comprar agua y tierras
en los pueblos donde las hay y donde frecuentemente
promueven luchas civiles e instalan gobiernos de elites sometidas
y… luego se acaba el dinero y vienen luchas internas y…
sigue el negocio de la venta de armas, corrupción y sobornos;
lo cual confirma que la historia es circular
(lo que es, es lo que fue y, lo que fue, lo que volverá a ser…).
El problema de sistema capitalista
es que el dinero “compra” casi todo y se concentra
en cada vez menos personas generando guerras,
sobornos, muerte, traición sin pensar en la equidad y bienestar social
negando que el planeta es de todos.
Así entonces al sistema capitalista lo sostienen las armas,
no, las leyes, por la naturaleza misma de su origen
(guerras, robo, explotación) y por la jamás domesticada
aun naturaleza animal de la humanidad ejerciendo el egoísmo global,
avaricia y la traición, lo cual confirma que el salvador, no vino?
murió su historia redentora en vano? o, no era, ni es poderoso…?
como lo demuestra el casi exterminio de Palestina
por Israel y cómplices (1948-2024).
Pablo Hughes Reyes (Uruguay 1946).
Los emiratos árabes unidos comprando tierras y agua, sin generar sustentabilidades locales
El creciente poder de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) compra tierras y agua para asegurar su propia sobrevivencia, consolidando la pobreza de los países menos desarrollados, endeudados dentro de ambientes de sobornos internacionales e incitaciones a guerras internas.
Mientras la atención está puesta en Gaza, en Sudán, otros conflictos han desatado hambrunas. La lucha estalló (2023) entre una facción rebelde llamada Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) contra las milicias estatales.
Ambas luchan por el control del país y de sus ricos recursos minerales y agrícolas. Se acusa a los Emiratos Árabes Unidos (EAU) de armar a los rebeldes. ¿Por qué? En parte, según algunos, para proteger los embarques de oro, ganado y cultivos (revista grain/financial times/pablo Hughes).
Y así, continua en auge la venta de armas entre los bandos beligerantes, luego intervenir en los gobiernos y después los créditos para la reconstrucción; y así, otra vez más adelante el mismo ciclo idiota.
En búsqueda de su propia seguridad alimentaria, los EAU han estado tomando el control de tierras fértiles en Sudán cultivando más de 170,000. Este inmenso proyecto agrícola, respaldado por el gobierno de los Emiratos, construirá carreteras con un puerto también nuevo en la costa de Sudán operado por árabes.
Las actividades agrícolas de los Emiratos en el extranjero están cada vez más ligadas a una red de puertos y de servicios logísticos controlados, donde se entremezclan intereses geopolíticos y militares. Esto puede empeorar las desigualdades en las relaciones globales de poder.
Desde la manipulación-crisis de los precios de alimentos desde 2008, el COVID-19 y la guerra de Ucrania, los EAU han acumulado alrededor de 960,000 hectáreas en el extranjero. Es necesario pedir cuentas a los EAU por su creciente poder de acaparamiento de tierras dentro del sistema alimentario global y, en especial por sus efectos directos sobre las comunidades locales afectadas (igual, Mr. Gates, ha comprado miles de hectáreas en EU y otros lugares).
Por otro lado los científicos dicen que: gradualmente vamos hacia un cambio en los sistemas alimentarios, para ser capaces de desarrollar lo que sea en cualquier lugar sin importar lo ambiental; pero otra vez, el vicio de la concentración de la ciencia en quienes tienen dinero para comprarla y usarla en su propio beneficio que, será el mismo problema con la robótica ¿quiénes poseerán los robots, que harán y quien alimentará a los humanos…?! ¿Cómo anda la ética en el uso de las ciencias…?
Además, el control del comercio alimenticio global está en pocas empresas transnacionales quienes manipulan los precios y distribución de las mercancías.
Para su propia seguridad alimentaria, los EAU (Europa, EU así como otros estados del Golfo pérsico), han ido tomando el control de tierras en Sudán con el fin de desarrollar actividades agrícolas; EU, por ejemplo, compra en Brasil en ambientes de violencia y corrupción.
No obstante Sudan, de ser un país rico por sus reservas de gas y petróleo continuamente hay guerras, muerte, hambre y claro, venta de armas que dividieron el territorio del país en 2011.
Desde la crisis de precios de los alimentos de 2007-2008, seguida por el Covid-19 y la invasión de Rusia a Ucrania, se alteró el abastecimiento para los estados del Golfo, los Emiratos han acumulado alrededor de 960 mil hectáreas de tierras de cultivo en el extranjero. Hoy en día, las transnacionales de los EAU controlan de una red de puertos y sistemas que se entrelazan para su seguridad alimentaria sin importar el hambre local.
Eau. La producción de alimentos en áfrica y otros países.
Los agronegocios de los EAU están en todo el mundo. Por ejemplo Egipto.
Empresas del gobierno EAU han invertido en Egipto en producción agrícola en más de 310,000 hectáreas de cereales, frutas, granjas lecheras y producción de alimentos para animales.
Los EAU y Egipto tienen buenas relaciones políticas, pero las relaciones económicas son muy desiguales.
Todo este modelo de economía muestra el alto nivel de dependencia entre los dos y el control emiratí de los puertos en el Mar Rojo y del Canal de Suez.
En África hay otras historias. En 2018, el gobierno Yibutí (en el mar Rojo, Aden y Arábigo) expulsó a Dubai P. World de sus puertos para mover mercancías hacia y desde Etiopía, que no tiene acceso propio al mar. Yibutí afirmó que el acuerdo había beneficiado injustamente a Dubái P. World, por lo que anularon el acuerdo, nacionalizaron el puerto y, decidieron participar con China.
Así, los EAU han interpuesto ante los tribunales una fuerte demanda contra Yibutí por cancelar el acuerdo y cobrar así enormes comisiones. Y aquí luego, todo cae en manos de los tribunales controlados por la ONU y la Corte Penal Internacionales, que son manipulados por poderes occidentales.
Más al sur y en Asia, las corporaciones de los EAU invierten en seguridad alimentaria abriendo espacios en Uganda, Kenia y Tanzania (azúcar, carnes, frijol, maíz, tee, petroquimicq, plátano, macadamia, aguacate, limón, naranja, etc).
En Tanzania, proyectos similares han sido causa de controversia por la violenta expulsión de poblaciones, para dar lugar a una reserva de caza para los reyes de los EAU.
En Kenia, Zambia y Zimbawue los EAU también han iniciado proyectos de agro-negocios.
En Asia también están abriendo importantes inversiones agrícolas los EAU. En Indonesia y las Filipinas,
En India, una iniciativa comenzó sus actividades recientemente en 2022: Los gobiernos de la EAU y de la India acordaron establecer un “corredor de alimentos” entre los dos países. Esto incluye la creación en India de un número potencialmente grande de “parques de alimentos”, donde se centralizará la producción, que luego se procesará para enviarla a los EAU.
Los parques de alimentos son zonas francas-libres, donde NO se podrán aplicar las leyes de la India que regulan el comercio de alimentos considerando el interés local.
El potencial de este proyecto es de gran alcance desarrollado solo entre India y los EAU, pero después lanzado bajo el paraguas de la alianza cuadrilateral entre india, Israel, EAU y EE.UU., la cual se originó a partir de los acuerdos de Abraham (las elites financieras globales supremacistas blancas).
En esencia, India proporciona la tierra y el trabajo agrícola; Israel y EEUU proveen la tecnología y los EAU proveen redes de mercado. Así, los EAU serian uno de los principales centros de distribución para el comercio global de alimentos entre Asia, Europa y África.
Este año, los EAU llevarán trabajadoras y trabajadores agrícolas desde la India a los EAU, para aumentar su producción de alimentos (especialmente en fincas verticales) y disminuir las importaciones. El plan es llevar primero a 20 mil personas para que trabajen en la agricultura y llegar con el tiempo a 200 mil.
También en Pakistán los EAU buscan establecer fincas agrícolas.
Un modelo similar está en funcionamiento en Europa y América Latina; los EAU han buscado una relación cercana con el gobierno de Serbia donde se combina inversiones en tierras de cultivo y ventas de armas (para guerras fraternales).
Luego, después de 2013 los EAU compraron 8 agrícolas de Serbia a cambio de apoyo de armas.
En los EEUU, desde hace varios años los EAU han invertido junto con Arabia Saudita en producción agrícola en Arizona, una región con escasez de agua de más de 12,000 hectáreas para el cultivo de alfalfa, la que después es enviada como heno a los EAU.
Existe descontento en Arizona, que se oponen a la entrega de derechos ilimitados de agua mientras que las personas comunes y corrientes sufren una sequía enorme y cada vez peor. Para su sorpresa: el fondo de pensiones estatal de Arizona está comprometido invirtiendo en estos proyectos?!
En américa latina, los EAU propagan su modelo cuidadosamente. Los inversionistas emiratíes ya producen aves en Brasil y fruta en chile y Perú. En México y Colombia actualmente buscan establecer negocios agrícolas.
En conjunto, los EAU buscan producir su propio alimento y controlar la distribución en el comercio global.
Por otro lado, las ambiciones agrícolas de los EAU están entrelazadas con la geopolítica y finanzas. Y las cosas pueden tornarse peores por una antigua rivalidad entre Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, que los empuja y acelera en paralelo por este camino.
La masiva hambruna que se ha desencadenado en Sudán debe ser considerada como un terrible recordatorio de por qué es necesario poner fin a los negocios con tierras agrícolas entremezclados con agendas geopolíticas. Es hora de exigir rendición de cuentas a EE.UU., Europa, los EAU, Israel y a sus aliados…
Finalmente en el nivel biográfico. Cada decisión de cada día es un acto político de libertad o sometimiento, de consumismo o salud, de concentración de la riqueza o equidad; por la verdad o el engaño; cooperación o desorganización e indefensión; respeto y dignidad o atropello por las elites del capital y la corrupción; defensa de las economías locales/globales o privilegios para las transnacionales monopolistas porque somos lo que decimos o callamos, lo que hacemos o dejamos de hacer… Usted que opina…?!
Artículo de divulgación del Centro de Estudios Eduardo Galeano.
“Ciencia es independencia para la democracia en la historia,
educación y la economía”.
Tlapancalco/Metepec, Tlaxcala. México.