A pesar de que en México no se cuenta con cifras exactas de cuantas personas tienen dislexia los cálculos apuntan a que entre un tres y un 10 por ciento de la población sufre algún grado de dislexia. Lo cual se puede traducir en que un millón de individuos en el país tienen dificultades para dominar el lenguaje.

El panorama en México es desfavorecedor para quien la enfrenta, ya que en territorio nacional se carece de un estándar de diagnostico lo cual complica que sea identificada; a esto también se suma que muchos docentes pueden confundir los errores comunes durante los primeros años de educación, como la inversión de la “d” y “b” con la presencia del trastorno.

En la sociedad actual se tiene que dejar claro que la condición de dislexia no tiene una relación directa con el nivel de inteligencia de una persona, aunque sí es considerada una discapacidad especifica del aprendizaje ya que afecta las capacidades de lectoescritura.

Lo anterior, puede traducirse como que habilidades básicas de lenguaje que se desarrollan durante los primeros años de vida, no logran hacerlo en el ritmo adecuado, al no poder reconocer y relacionar los sonidos con las letras.

Para evitar el impacto de la dislexia en la vida cotidiana de un individuo se deben fomentar enfoques y técnicas educativas especificas para que sean lectores capaces. Con el objetivo de visibilizar a las personas que la enfrentan cada ocho de octubre se conmemora el Día Internacional de la Dislexia.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here