La sociedad actual sería imposible de concebir sin actividades como la navegación, responsable de permitir el desarrollo comercial; que a su vez llevó a la búsqueda de otras rutas a destinos como la India con el objetivo de lograr una expansión territorial y religiosa.
Este panorama es el catalizador del genovés Cristóbal Colón quien parte de Europa con tres barcos tripulados, producto de una inversión de Isabel de Castilla, integrantes de la nobleza, comerciantes y magnates.
Dicha odisea tendría como resultado que el doce de octubre de 1492 llegara a lo que hoy conocemos como América al encontrarse con las Antillas y desembarcar en la isla que bautizó con el nombre del Salvador.
Hasta hace un par de años este evento se celebraba bajo el nombre de “Día de la Raza” conmemorando el encuentro dos culturas; sin embargo, junto al termino “descubrimiento de América” se han cuestionado por encontrarlas gravemente problemáticas, ya que reduce, simplifica e invisibiliza las relaciones sociales y de poder resultado de la conquista y suprime la existencia de una historia previa a la llegada de los españoles.
Siendo esta la razón de que en los países que celebran esta fecha además del Día de la Raza ha tomado títulos como Día de la hispanidad, Día del Descubrimiento y Día de la Fiesta Nacional.