La temporada del 12 al 25 de diciembre es la más intensa en el uso de pirotecnia en Tlaxcala
A pesar de los llamados de las autoridades, como la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC), para reducir o eliminar el uso de pirotecnia debido a los riesgos de accidentes, la comunidad en Tlaxcala mantiene esta tradición durante la temporada navideña.
Este uso persistente de fuegos artificiales tiene consecuencias significativas en la calidad del aire. La quema de pirotecnia libera partículas suspendidas (PM2.5 y PM10) y gases contaminantes que afectan la salud pública, especialmente en personas con problemas respiratorios.
La temporada del 12 al 25 de diciembre es la más intensa en el uso de pirotecnia en Tlaxcala, ya que coincide con celebraciones religiosas y tradiciones como las posadas, los arrullos del Niño Dios y otras festividades navideñas. Durante estas fechas, las calles se llenan de luces y explosiones, convirtiéndose en un símbolo de alegría para muchos, pero también en una fuente de contaminación y riesgos para la salud y la seguridad.
En cuanto a los accidentes, en octubre de 2024 se registró una explosión en un polvorín presuntamente clandestino en Acuitlapilco, resultando en la muerte de una persona y tres heridos, todos miembros de una misma familia. Además, en agosto de 2024, una explosión de pirotecnia en Xaloztoc dejó tres muertos.
En los últimos 14 años, al menos 29 personas han fallecido en Tlaxcala debido a explosiones relacionadas con pirotecnia, y la cifra sigue en aumento cada año. A pesar de estos incidentes y las advertencias de las autoridades, la tradición del uso de pirotecnia persiste en la comunidad, lo que plantea desafíos continuos para la salud pública y la seguridad en el estado.
Este incremento en el uso de fuegos artificiales es una muestra de cómo la tradición se mantiene viva, pese a las constantes advertencias de las autoridades.