La tradición de las alfombras de aserrín: un arte efímero que enriquece el atrio de la Basílica de Nuestra Señora de la Caridad en Huamantla
La Basílica de Nuestra Señora de la Caridad, en Huamantla, Tlaxcala, no solo es un lugar de devoción religiosa, sino también un espacio donde se preserva una de las tradiciones artísticas más representativas del municipio: las alfombras de aserrín. Estas obras efímeras, elaboradas con esmero y creatividad, no se limitan a “La Noche que Nadie Duerme”, sino que adornan el atrio del templo durante todo el año, atrayendo tanto a turistas como a los propios habitantes de la región.
En cualquier mes, quienes visitan este emblemático lugar pueden admirar alfombras de aserrín con diseños elaborados que reflejan motivos religiosos, culturales o festivos. Sin embargo, las festividades decembrinas y navideñas destacan de manera especial, pues el atrio de la Basílica se llena de coloridas creaciones que celebran el espíritu de la temporada. Estas alfombras, confeccionadas por artistas locales, incorporan detalles alusivos a la Navidad, como nacimientos, estrellas, y escenas del Adviento, enriqueciendo aún más la experiencia para quienes se acercan a este recinto sagrado.
Además de su relevancia religiosa, estas alfombras son un atractivo turístico de gran importancia para Huamantla. Su belleza, acompañada del fervor de los artesanos que las elaboran, refleja la identidad cultural del municipio, que se ha consolidado como un referente de este arte efímero en México y el mundo.
Durante las fiestas navideñas, familias enteras acuden a la Basílica para admirar estas creaciones, que cambian constantemente, garantizando una experiencia única en cada visita. Este despliegue de talento y dedicación no solo es un homenaje a la Virgen de la Caridad, sino también una invitación para descubrir la riqueza cultural de Huamantla.
Ya sea en verano, cuando la ciudad vive el fervor de “La Noche que Nadie Duerme”, o en el ambiente mágico de diciembre, el atrio de la Basílica de Nuestra Señora de la Caridad siempre ofrece una muestra de la tradición y el arte que caracteriza a esta región de Tlaxcala. Un destino imperdible para quienes buscan conectarse con la historia, la fe y la creatividad de un pueblo orgulloso de sus raíces.