Autoridades reiteran el llamado a reducir el uso de pirotecnia por sus impactos ambientales y riesgos a la salud.
Tras las celebraciones por el Día de la Virgen de Guadalupe, diversas regiones del país registraron movimientos sociales masivos y uso intensivo de pirotecnia, lo que en años anteriores ha generado picos temporales en las concentraciones de partículas finas (PM2.5 y PM10) en la atmósfera, esto afecta la calidad del aire y eleva los riesgos de padecimientos respiratorios, especialmente en personas vulnerables.
Autoridades ambientales han recordado que durante fechas festivas la combinación de bajas temperaturas, menor ventilación atmosférica y fuentes adicionales de partículas (como fuegos artificiales) puede deteriorar la calidad del aire, aumenta la presencia de contaminantes que penetran profundamente en los pulmones. En este contexto, organismos como la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales han exhortado a disminuir el uso de pirotecnia y a tomar precauciones para proteger la salud pública.
En Tlaxcala, aunque no se reportó una contingencia ambiental formal durante la noche del 12 de diciembre, los datos de monitoreo en tiempo real muestran que las condiciones de calidad del aire durante esos días se mantuvieron en rangos mayoritariamente “buenos” a “satisfactorios”, con niveles de partículas relativamente bajos comparados con otras grandes zonas urbanas. Por ejemplo, datos disponibles del 12 de diciembre temprano en la mañana indicaron un Índice de Calidad del Aire (AQI) de 39 (bueno) en general, con PM2.5 alrededor de 8 µg/m³ y PM10 de 12 µg/m³, niveles que no representan riesgo significativo para la salud en condiciones normales.
Durante las horas anteriores y posteriores a la medianoche del 11 al 12 de diciembre, los registros reflejaron fluctuaciones típicas de un ambiente nocturno invernal sin eventos extremos: durante el periodo de 24 horas el AQI varió, con máximos cercanos a 63 (moderado) y mínimos de 22 (bueno), un patrón que indica niveles de partículas que pueden deberse a fuentes habituales combinadas con actividades humanas festivas, pero sin alcanzar niveles críticos.
Aun así, el uso de pirotecnia es un tema sensible en la entidad, ya que Tlaxcala concentra un alto número de incidentes relacionados con fuegos artificiales, lo que ha llevado a autoridades de Protección Civil y ambientales a reforzar campañas de prevención y llamadas a la población para reducir riesgos tanto de accidentes como de emisiones contaminantes adicionales durante festividades.
Estas recomendaciones se enmarcan en la intención de minimizar picos de partículas que, de acumularse bajo condiciones de mala ventilación, podrían elevar los niveles de PM y afectar la salud respiratoria de la población local.
