Transportistas de pasaje, turismo y carga adheridos a la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos A.C. (Conatram) se manifestaron en la capital del estado cerrando el primer cuadro de la ciudad, exigen que no haya más desfalcos por parte de las empresas de grúas y corralones quienes cobran lo que quieren, indicó Felipe García Hernández, vicepresidente regional.
Durante la movilización dijeron que “cuando entran las grúas por un servicio de 5 mil lo aumentan hasta 80 mil pesos o la cantidad que se les ocurre, y ninguna autoridad nos brinda la atención, hemos ido a la Secte que es donde nos deberían atender y ni conocemos al secretario, después de 10 veces de solicitarlos siempre envió a sus asistentes para finalmente decir que ellos no tienen la facultad de regular a estas empresas”.
Dijo que desde el 21 de abril se le manifestó al titular del Ejecutivo local que requerían hablar con él para solucionar este problema ciudadano y “si a la autoridad no le importa que nos estén extorsionando las mismas empresas a las cuales ellos les dieron permiso, pues no sabemos, aquí venimos una comisión a la Secretaría de gobierno y a la Secte y no nos quieren atender aquí en Tlaxcala”.
Amagaron con manifestarse en las casetas de acceso al estado de Tlaxcala para que el gobierno federal apoye y escuche, porque los gobiernos estatales y municipales no hacen caso.
En este momento tienen dos unidades “donde cobraron un excedente de 40 mil pesos, por un tracto y la caja, y por ese servicio máximo son 5 mil pesos, fue un arrastre, no fue accidente, eso fue una recuperación de robo, y las pérdidas serán más de 50 mil pesos. El transportista pierde además sufre primero el robo y luego pagar por la recuperación, ese es un tema que afecta gravemente”.
Los transportistas dijeron que son doblemente afectados porque primero son víctimas de la inseguridad con los elevados robos y el gobierno que no quiere hacerse responsable para regular a las empresas de grúas, quienes aseguran que “estamos bien parados en el gobierno”.
Incluso denunciaron ante los medios que salen perdiendo más porque en los lugares donde quedan las unidades, les quitan las piezas a los vehículos y además son víctimas de amenazas en la recuperación de las unidades.
Pidieron conocer quienes son los dueños de las compañías de grúas, porque trabajan en la “impunidad”, dañando al sector transportista que está regulado por parte de las autoridades mientras que a los corralones no y por eso cobran lo que quieren.