Las tierras tlaxcaltecas abarcan una superficie de 3 mil 996.6 kilómetros cuadrados lo cual  es equivalente al cero punto dos porciento de la superficie del país, el estado destaca por estar comprendida en una provincia fisiográfica un “eje neovolcánico”.

En consecuencia la superficie estatal destaca por poseer una flora predominante de coníferas y encinos, seguidos por tierras húmedas en donde es posible encontrar matorrales y pastizales.

Dentro de la superficie ocupada por cuerpos de agua la mayor extensión le corresponde a ríos, seguidos por presas y lagunas.

Como sociedad es fundamental que se comprenda que más que un territorio el lugar donde nos desarrollamos es vida, parte de un planeta que es un sistema vivo y que requiere que todos los que la conforman sean parte de su cuidado.

Pocas ocasiones los individuos tienen la conciencia para reflexionar sobre el impacto que los actos cotidianos tienen sobre el entorno y en consecuencia sobre el planeta. A pesar de que se sabe que hechos como la reciente pandemia demuestran que la salud de la especie humana esta estrechamente ligada con el estado del planeta Tierra.

De acuerdo con  análisis del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, cada cuatro meses surge una nueva enfermedad infecciosa en los humanos. Dentro de estas se estima que un 75 porciento proviene de los animales, demostrando de esta manera la relación existente entre la salud humana, animal y ambiental.

Con el objetivo de concientizar a la sociedad respecto a los problemas generados por la superpoblación, la contaminación, la conservación de la diversidad y un sin fin de complicaciones ambientales, desde el año de 1970 cada 22 de abril se conmemora el Día Internacional de la Madre Tierra.