En este mes de septiembre se cumple un año más de la llamada alianza y el inicio del mestizaje, situación que ha llevado a considerar a Tlaxcala como cuna de la nación. En sí, desde hace varios años, en diferentes medios y ámbitos, se ha asumido como una fecha importante para la historia de tlaxcalteca.
Lejos de aceptar este tema como una conmemoración, se invita a reflexionar sobre el papel que ha desempeñado Tlaxcala en los últimos quinientos años. Durante más de medio milenio la realidad tlaxcalteca se ha transformado de manera radical. Es necesario explicar cuáles fueron las causas que los llevaron a los tlaxcaltecas a ser partícipes de uno de los acontecimientos más importantes de la época moderna. La conquista de México cambio el rumbo de la historia de la humanidad.
A partir de esta fecha, es posible fomentar el conocimiento de la historia, con el fin de despertar en la sociedad actual un sentido de pertenencia. Por lo tanto, desde las escuelas de educación básica hasta nivel superior, los niños y jóvenes pueden conocer su pasado con la intención de generar en ellos una conciencia histórica, que sientan el orgullo de formar parte de un pueblo cuya tradición histórica ha estado presente desde tiempos mesoamericanos hasta el día de hoy.
Mucho se ha escrito y se ha dicho sobre la traición tlaxcalteca, que resultaría redundante abordar el tema en este espacio, por lo que se retoma el tema inicial. Más de 500 años de la alianza y el mestizaje. El tema ha despertado interés por releer las fuentes históricas, para saber qué fue lo que plasmaron los actores en sus obras. La primera pregunta es, ¿quiénes eran los interesados en dar a conocer una alianza? ya que a partir de esta idea se dirige la búsqueda de información.
Una lectura obligada son las “Cartas de relación” de Hernán Cortés. Estas cartas han sido publicadas en diferentes momentos, por lo que son de fácil acceso. En la segunda carta se aborda el tema de la llegada de los españoles a Tlaxcala. Cortés informa al rey sobre el recibimiento que tuvieron en diferentes pueblos y cómo las noticias de un gobernante poderoso, que dominaba buena parte del territorio, le despertó el interés por conocerlo. Ya tenía noticas sobre los tlaxcaltecas, enemigos de los mexicas, que habían resistido los enfrentamientos y como los mantenían cercados; narra los enfrentamientos en el territorio y lo cruentos que fueron.
Al llegar al tema del encuentro con los señores de Tlaxcala, el conquistador refiere “vinieron los tlaxcaltecas a pedir disculpas por los agravios cometidos y se dieron por vasallos y amigos del rey”. Esta referencia da mucho que decir. En primer lugar, Cortés no habla de una alianza, refiere un encuentro cordial en el que los tlaxcaltecas se adhieren a su ejército. Qué implicaciones tiene esta frase, al asumirse los tlaxcaltecas como vasallos y amigos del rey, pasaron a formar parte del ejercito hispano, y por tal motivo, de la corona de Castilla.
Para hablar desde otra perspectiva, en las obras históricas de los capitanes, las referencias sobre este hecho son limitadas, aunque fueron testigos, se enfocaron en los aspectos que quisieron destacar sobre su participación en la conquista. Estos escritos fueron redactados varios años después y se presentaron como relaciones de méritos y servicios, ya sea para reclamar derechos o defenderse en los juicios de residencia.
En lo que se refiere a las fuentes históricas de los tlaxcaltecas, el testimonio más cercano a este hecho es el “Lienzo de Tlaxcala”, con la salvedad de que el original data de la década de 1550. Este códice pictográfico de tradición indígena representa el apoyo que los tlaxcaltecas brindaron a Cortés. Se registró un recibimiento cordial, donde los señores entregaron a sus hijas a los conquistadores, y la forma en que apoyaron con alimentos, presentes y hombres para engrosar el ejército hispano, pero no los enfrentamientos entre ambos grupos. La intención de presentar un testimonio de este tipo, fue para recordar al rey lo fundamental que resultó su apoyo, con la intención de reclamar los beneficios que acordaron con Hernán Cortés.
Para terminar, a finales del siglo XVI, Diego Muñoz Camargo al escribir su “Historia de Tlaxcala” presentó a los tlaxcaltecas como hispanos y cristianos, como conquistadores de México-Tenochtitlan, donde reclaman derechos y privilegios.
Esta reflexión tiene la intención de despertar el interés por leer las fuentes históricas, cada una tiene sus motivos, por lo que presentan diferentes versiones sobre un mismo hecho. Así como los conquistadores redactaron su versión de la historia, los tlaxcaltecas heredaron un legado documental digno de conocerse para exaltar la grandeza de un pueblo que, pasados más de 500 años de la conquista, sigue intacta. Y, sobre el mestizaje, es un tema de otro costal.
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