12 de diciembre
En los últimos años se ha puesto en tela de juicio la credibilidad de la religión, a tal
grado, que se ha quebrantado la relación entre las doctrinas y la conciencia de los
fieles cuestiona si la esperanza y la fe están a la altura de las exigencias del mundo
moderno. Es necesario aclarar que todas las opiniones e impugnaciones que
descalifican el papel de la religión van sobre la institución y los hombres que
predican la palabra por el mundo, mas nunca al dogma.
Mucho se ha criticado el papel que desempeña la religión en la sociedad actual.
Aspectos positivos exaltan la fe, y los negativos, incluso peyorativos, han creado
situaciones que, lejos de enaltecer las creencias, llevan a los extremos la convicción
humana para presentar una sumisión y manipulación ante el credo religioso, como
se ha visto a la virgen de Guadalupe.
La guadalupana se ha convertido en un elemento primordial de la identidad
mexicana desde que abanderó al movimiento insurgente de 1810. Es importante
mencionar que José María Morelos y Pavón en los “Sentimientos de la Nación” de
1813, pidió se instituyera el 12 de diciembre de cada año, como la fecha para la
celebración de la Patrona de la Libertad. A pesar de que en diferentes momentos
de la historia se ha cuestionado la veracidad de la epifanía, su imagen pasó a una
dimensión sagrada para ser venerada por millones de devotos que año con año
esperan esta fecha para visitar su santuario.
A la virgen se le define como la madre de los mexicanos cuyo culto se ha extendido
a varios países de habla hispana, incluso algunos que no tienen como lengua el
español. Su impacto ha cobrado tal magnitud, que es una de las imágenes más
veneradas es el mundo.
Las conclusiones de antaño fueron latentes, después de la lectura de los textos que
abordan el tema de la aparición, no confirman, pero tampoco desmienten el hecho en cuestión. En sí, los franciscanos, los primeros frailes que llegaron a la Nueva
España no mencionan tal acontecimiento, y más en una época en la que se está
trabajando para la evangelización y consolidación de la religión católica entre los
indígenas.
Será hasta la segunda mitad del siglo XVI cuando en la Nueva España se hace
latente una crisis ideológica y religiosa. En esta época se cuestionó la posibilidad
de implantar la fe en una tierra donde los hombres solo se ocupaban de cuestiones
económicas, negando la posibilidad de un arraigo religioso como un elemento de
cohesión social. Incluso, desde España, se manifestaba la preocupación por el
conocimiento y la difusión de las creencias religiosas de los indígenas, muy
peligrosas para cumplir con la encomienda dada por el Papa a los reyes católicos.
Con tal convicción, a partir de este momento, muchos frailes escriben sus obras
para mostrar que aun en tierras de infieles pueden surgir personajes avocados a
propagar la palabra de Dios, modelos de santidad que consagran su vida para la
salvación de las almas de los indígenas recién conquistados. Ante esta situación,
además de consolidar la evangelización, se debía brindar a los criollos ese elemento
de identidad para sentir el arraigo a la tierra que los vio nacer.
De la elocuencia, pero sobre todo honestidad intelectual de don Joaquín García
Icazbalceta, surgió la obra donde emite su opinión sobre Juan Diego y las
apariciones de la virgen de Guadalupe. Al ser un devoto guadalupano, se mostró
renuente, pero ante la insistencia del arzobispo, que era su amigo, se limitó a
examinar las evidencias desde un punto de vista científico alejado de las
controversias religiosas.
La sociedad actual requiere de una revalorización de los principios morales que
sustenten la credibilidad social. Con o sin elementos religiosos es importante que
se establezca un clima de respeto para la convivencia, que, sin ampararse bajo la
libertad de expresión, se ataque deliberadamente a las personas por sus creencias.
Lo importante para cada persona es saber que lo que cree, es aquello que la da una
paz interior. Ante esta situación, surge la pregunte ¿Qué tan alejada estará la fe de
la razón?
Por: Luis Manuel Vázquez Morales
luis_clio@hotmail.com
@Luvazquezcarol