El número actual de pacientes anualmente diagnosticados en México con esclerosis múltiple supera los 20 mil, entre la población de 20 a 35 años, pero es raro que sea detectada durante sus primeras etapas y la enfermedad es muy activa por lo que en gran parte de los casos cuando es detectada ya ocasiono algún grado de discapacidad.
Este panorama hace que, aunque el territorio nacional cuente con una de las cifras más bajas entre las naciones, muchos expertos se pregunten si esto se debe solo a una falta de diagnósticos y no a la verdadera prevalencia de la enfermedad.
La esclerosis múltiple es difícil de diagnosticar pues daña el sistema nervioso central y dependiendo de la zona afectada los síntomas varían, por lo que un médico general rara vez llegara al diagnostico efectivo y cuando se llega con el neurólogo el daño ya avanzo a la invalidez física del individuo.
Una vez que una persona es diagnosticada, se puede retrasar el progreso de la enfermedad y controlar la sintomatología con el objetivo de mejorar de manera significativa la calidad de vida de quien la padece.
Para fomentar una mayor conciencia alrededor de la enfermedad cada 30 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Esclerosis Múltiple.