Durante el periodo de 2015-2020 las estimaciones aseguran que dos mil 820 personas se fueron de su lugar de origen por sus niveles de violencia y decidieron residir en Tlaxcala.
Este contexto se confirma por medio de datos de la Unidad de Política Migratoria, Registro e Identidad y la Secretaría de Gobernación que en 2021 expidieron 56 tarjetas de visitantes por razones humanitarias en Tlaxcala. Una gran parte de los migrantes que recibieron este apoyo provenían del norte de Centroamérica.
A pesar de esto Tlaxcala es considerada una de las entidades con menor número de población migrante, ya que en 2020 las estimaciones apuntaban a que existían 4 mil 150 personas residiendo en el estado bajo esta condición.
Una gran parte de las personas que abandonan su lugar de origen lo hacen obligados por los problemas internos de la nación como: conflictos armados, problemas económicos, persecución y violencia.
En los migrantes las personas que no pueden regresar a su país de origen consecuencia de un temor fundado, es decir circunstancias que alteraran seriamente el orden público y que en consecuencia afectaran su integridad física y psicológica obligándolos a pedir asilo en otra nación son conocidos como refugiados.
Para los refugiados el hecho de abandonar el lugar en conflicto resulta un alivio, pero su travesía en muchas ocasiones no termina, pues a pesar de que son recibidos en otras naciones en ocasiones no se cuenta con la dinámica correcta para asegurar su unificación con el nuevo entorno social.
Siendo consciente de este panorama la Organización de las Naciones Unidas promueve cada 20 de junio el Día Mundial del Refugiado con el objetivo de visibilizar a estas personas e incentivar a los países y su población a tomar medidas para apoyar a quienes viven en su territorio bajo esta condición