Mediante un informe de la Comisión Federal de Electricidad y de la Confederación Nacional de Comerciantes de Material y Equipo Eléctrico (Conacomee), Tlaxcala se encuentra entre los cinco estados donde mayor número de población se roba la energía eléctrica en el país.

En conferencia de prensa, Laura Esquivel, vocera oficial de Expo Eléctrica Internacional y Ángel Flores Santillán, presidente de la Asociación Poblana de comerciantes eléctricos, informaron que el Distrito Federal, Guerrero, Estado de México, Querétaro y Tlaxcala, son donde la paraestatal estima que en el país hay más de 100 mil conexiones irregulares.

El robo de luz se realiza principalmente en colonias irregulares, lo que implica el 2 por ciento de poco más de 300 millones de kilowatts que se facturan mensualmente al mes en Querétaro.

Mientras que a nivel nacional el daño por el robo de energía asciende a más de 40 mil millones de pesos, según la Confederación Nacional de Comerciantes de Material y Equipo Eléctrico con base en información aportada por la Comisión Federal de Electricidad.

Ahondaron que el 32 por ciento de los diablitos están dispersos en la región del centro del país. De acuerdo con el reporte de la Conacomee, el robo de electricidad se sanciona con castigo de cuatro a 10 años de prisión y una multa de 180 a 500 días de salario mínimo vigente.

Informaron que el 92 por ciento de la energía eléctrica sustraída ilegalmente del sistema nacional de distribución se concentra en apenas cinco entidades: El ocho por ciento restante se reparte entre 27 estados. Un dato revela la magnitud del problema.

Con lo anterior, la CFE pierde al año el triple de lo que ingresa por el concepto de alumbrado público. Mientras las pérdidas se calculan en más de 40 mil millones de pesos al año, lo facturado por alumbrado fue de 10 mil 597 millones en 2017.

La Conacomee calculó que con una buena aplicación de la reforma energética las pérdidas por el robo de energía eléctrica podrían reducirse hasta en un 30 por ciento en este y los próximos años.

Aunado a lo anterior, comentaron que el robo de combustibles no es el que provoca más pérdidas a las finanzas públicas, sino el robo de energía eléctrica y el impago de facturas por este servicio, pues desde 1994 a la fecha no se ha podido cobrar a 6 millones 941 mil usuarios.

De acuerdo con información que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) proporcionó a la Plataforma Nacional de Transparencia, las pérdidas ascienden a 76 mil millones de pesos: 40 mil millones por el robo de energía eléctrica y 36 mil 359 millones a facturas no cobradas.

Dichas pérdidas son 2.5 veces mayores de lo que provocan los huachicoleros a Pemex, un delito que no solo provoca pérdidas a esta empresa, sino también a estados, municipios e instituciones como la Procuraduría General de la República, la Sedena, la Marina y que ascienden a hasta 30 mil millones de pesos anuales.

Con respecto al robo de electricidad por el uso de diablitos y cables en postes, información de la CFE afirma que el robo asciende hasta 40 mil millones de pesos.

Al menos 30 mil millones de lo que se le fuga a la CFE en cobros no facturados y robo de energía eléctrica (que va hasta los 76 mil millones de pesos) iguala a lo robado por huachicoleros y el crimen organizado a Pemex. 

En el caso de energía limpia y solar, indicaron que de acuerdo a información del gobierno estatal, la entidad es un referente a nivel nacional tanto en generación como de consumo energético; ya que es el 30 estado productor de energía, pero también está dentro de los primeros diez (20) en consumo, ejemplo de ello es el crecimiento de 1.4 respecto a los 3902 gigawatts de consumo anual registrado al mes de septiembre, esta situación obliga al estado a poner atención en desarrollar políticas públicas para la generación de energía, en especial energía verde y sustentable que pueda mitigar los efectos del cambio climático.

Incluso dijeron que México es uno de los cinco países en el mundo con mayor atractivo para invertir en energía solar, ya que su ubicación geográfica permite el desarrollo de estos proyectos y es el mayor productor de módulos fotovoltaicos en América Latina, Tlaxcala participa en el crecimiento de por lo menos 10 por ciento al año.

Se tiene el objetivo que para el 2018, el 25 por ciento de la electricidad generada en el país, sea a través de fuentes renovables y tecnologías limpias, para que en el 2024, el 35 por ciento de la demanda energética en México sea cubierta por estas mismas tecnologías.

El estado de Tlaxcala juega un papel muy importante en esta rama de la producción de energía limpia y renovable, pues consideran los inversionistas que la entidad tiene condiciones climáticas buenísimas para la generación de energía solar, regularmente los 365 días del año, se cuenta con luz solar, siempre se tiene a pesar del frío, la radiación solar es muy buena.

Lo anterior al anunciar la Expo Eléctrica Internacional 2018 a realizarse en la CDMX los días cinco, seis y siete de junio.

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