De acuerdo con la diócesis de Tlaxcala, la edificación del Santuario de los Niños Mártires aún tendrá que esperar, a partir de la atención que tanto la iglesia católica como el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) están ofreciendo a los templos afectados por el sismo de septiembre.

El Vicario General de la Diócesis local, Jorge Iván Gómez Gómez, informó que si bien la edificación del santuario se encuentra establecida en el decreto que emitió El Vaticano a propósito de la canonización de los tres Niños Mártires, de momento no es prioridad concretarlo.

Y es que las afectaciones ocurridas hace poco más de once meses, frenaron cualquier tipo de proyecto que la diócesis local, en conjunto con autoridades de los tres niveles de gobierno, tenían contempladas para cumplir con todos los puntos de la canonización de Antonio, Cristóbal y Juan.

Al respecto, informó que los trabajos de reconstrucción ya se encuentran avanzados en aquellos templos que resultaron con algún tipo de afectación importante.

Por ejemplo, las acciones se están fortaleciendo en el templo de San Felipe Ixtacuixtla, en San Francisco Tepeyanco, San José y la Basílica de Ocotlán, estas dos últimos en la capital del estado, los cuales registraron importantes daños.

Por su parte, a través del portal electrónico del INAH, se puede consultar parte de los trabajos que se están realizando en la entidad y sus edificios afectados.

Son 117 monumentos que resultaron con daños por el sismo, en su mayoría templos de culto religioso, que a casi un año del sismo están siendo intervenidos con diferentes montos presupuestales.

Para el caso particular de la parroquia de San José, uno de los edificios más emblemáticos para el estado de Tlaxcala, se realizaron diferentes acciones.

Entre ellas, la estabilización de los cuerpos de torre que tenían tendencia al movimiento y también se apuntalaron los elementos de pináculos que están en los muros laterales de la nave principal.

Lo anterior fue expuesto por el arquitecto Gelvin Xochitemoc Cervantes, perito de la Sección de Monumentos Históricos del INAH en el estado, quien agregó que los primeros y más importantes trabajos consistieron en el apuntalamiento del edificio para evitar mayores daños.

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