Eder Pérez Marcial y Edgar de Gante Ortiz, son dos jóvenes tlaxcaltecas con discapacidad visual preocupados por la falta de inclusión social y sensibilización que, en general, tiene la población con respecto a las personas que enfrentan algún problema de este tipo.
En entrevista para Síntesis, anunciaron la puesta en marcha de un proyecto en el que buscan precisamente, que la población en general tenga un mayor interés en el desarrollo de personas con discapacidad y con ello eliminar lo mismo barreras sociales que estructurales.
Para Eder Pérez, la discapacidad es más grande que la de su compañero, pues mientras que él la tiene total, la de Edgar de Gante es discapacidad visual baja.
A partir de sus condiciones y la poca ayuda que recibieron al adquirir la discapacidad, se mostraron preocupados por la falta de instancias de apoyo u orientación que les permitiera acceder a aspectos desde los más básicos, por ejemplo, la enseñanza del idioma braille.
“Con este proyecto lo que buscamos es enseñar el sistema braille tengan o no tengan la discapacidad. Y también desarrollar la parte de cómo acercarse a una persona y ofrecer ayuda. Este proyecto lo desarrollamos actualmente en Huamantla en donde nos abrieron las puertas de la biblioteca pública, y ahí es en donde estamos trabajando”.
Y es que la realidad de Eder es más complicada, ya que a sus 27 años ha tenido que lidiar con una serie de obstáculos que han elevado su discapacidad, sin embargo, eso no representó impedimento para que pudiera estudiar una carrera técnica en masoterapia (aplicación de masajes) y abrirse paso en un mundo cada vez más complicado.
Enfrentaron discriminación por padecer una discapacidad
Edgar de Gante, por su parte, si bien tiene una discapacidad visual baja que le ha permitido desarrollar más actividades, también ha encontrado obstáculos que en la sociedad le han aumentado su problema.
“Yo no tuve la fortuna de encontrar un empleo como tal, soy ingeniero en gestión empresarial. Las puertas de unas empresas me las abrieron pero otras nos dijeron que no se puede, la finalidad es no quedarnos atrás. Estamos desarrollando un proyecto ambicioso que ayudará a la sociedad en general y no únicamente a los que enfrentan discapacidad visual”.
De acuerdo con las proyecciones de Edgar, el proyecto conjunto con su compañero pretende que la gente se dé cuenta de que la discapacidad visual no limita, sino que a pesar de la adversidad es posible salir adelante.
Proyecto ambicioso e incluyente
El proyecto consiste en que a través de diferentes grupos de personas, se realicen acciones de sensibilización para que, en primer lugar, experimenten cómo es el enfrentar una discapacidad, en este caso visual, y posteriormente emprender la enseñanza del idioma braille.
Al respecto, advirtieron que las acciones no están dirigidas a un sector en particular, pues se pretende que toda la ciudadanía pueda ser orientada con respecto a estos temas que son tan necesarios para la población.
De momento, las prácticas se realizan durante los días lunes, miércoles y viernes en un horario de nueve de la mañana a las doce o una de la tarde, en las instalaciones de la biblioteca municipal de Huamantla.
“Es para toda la sociedad, este proyecto es grande porque ayudará en el sentido de cómo se tienen que acercar a una persona con discapacidad, en este caso nosotros representamos la visual”.
“Queremos que sepan cómo se pueden acercar a personas como nosotros, por ejemplo ayudarnos a cruzar la calle, además también contemplamos la enseñanza del braille tengan o no tengan la discapacidad”.
Entre las proyecciones de los entusiastas Eder y Edgar, se encuentra llevar el proyecto a más municipios del estado de Tlaxcala y con ello coadyuvar a que la ciudadanía desarrolle prácticas de sensibilización y con ello lograr una mayor inclusión para las personas que enfrentan cualquier tipo de discapacidad, en este caso, la visual.