Fotografía: Mauricio García/Síntesis
Un pacto con las élites sumando a banqueros de Wall Street en el gabinete, la polarización y el miedo frente a detractores o sectores como los migrantes mexicanos, que impactará temas como paridad cambiaria y flujos de remesas, lo que afectará los índices de pobreza extrema en estados con alta marginación.
“Si hay mucha incertidumbre, pero también un ambiente de miedo que domina el sentimiento, nadie habla del miedo…”, sentenció el especialista en Marketing Político y comentarista televisivo Erick Guerrero Rosas, al advertir que la campaña de Donald Trump se basó en el miedo y las amenazas.
Y es que Trump ha escrito entorno a su estilo de negociar: Con mis interlocutores problematizo lo más posible, si se debilitan ¡los aplasto!, si son fuertes, negocio con ellos”, abundó en conferencia auspiciada por Consultores Estratégicos Integrados de Raúl Rangel.
Añadió que también Trump se apostó al populismo, es hábil y mañoso para saber que el voto razonado no existe, explotan necesidades y resentimientos, polariza y provoca miedo en sus detractores -por ejemplo, al enfrentar a 33.6 millones de migrantes mexicanos radicados en Estados Unidos-.
Guerrero estimó que bajo las circunstancias actuales si podrá ser reelecto por un segundo periodo de cuatro años, pues arma un espectáculo de dos pistas, uno para atraer a la multitud y otro para negociar con las élites.
Donald Trump, con Maestría en Administración de Negocios (MBA de Wharton, Pennsylvania), es licenciado en Ciencias con especialidad en Economía y Antropología no es ignorante, sino perverso, añadió Guerrero Rosas.
Comentó que el Muero desde 1994 existe en una tercera parte de la frontera, está militarizado desde 1996 y tiene 20 mil agentes de la Patrulla Fronteriza, con mil 200 kilómetros de los tres mil 200 de los límites entre México y Estados Unidos.
En torno a las deportaciones, consideró que si es grave generará un impacto económico para México, al añadir las mayores salidas se han registrado en las gestiones de Eisenhower con 13 millones, William Clinton con 12.3 millones, George W Bush padre con 10.3 millones, Bush hijo con 4.1 millones y Obama con 2.8 millones.
Aseveró que la inmigración ilegal no bajará, pero si impactará el riesgo para los indocumentados, inseguridad y corrupción, pues los mexicanos que busquen oportunidades en Estados Unidos seguirán intentando los cruces.