Seúl. Cuatro espías norcoreanos estuvieron involucrados en la muerte del medio hermano del líder norcoreano Kim Jong Un, declararon el lunes representantes de las agencias de seguridad surcoreanas.
En sesiones privadas con legisladores surcoreanos, los emisarios del Servicio Nacional de Inteligencia dijeron que cuatro de los norcoreanos identificados como sospechosos por la policía en relación a la muerte de Kim Jong Nam son empleados del Ministerio de Seguridad Estatal, la agencia de espionaje norcoreana.
Según Li Cheol Woo, uno de los legisladores que asistieron a las sesiones, los funcionarios dijeron que otros dos sospechosos están vinculados con el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte.
Otro legislador, Kim Byeong-ki, relató que los funcionarios expresaron que Kim Jong Un puso en funcionamiento una maquinaria «de terrorismo de estado» para lograr la muerte de su hermano.
Los legisladores no divulgaron cómo los funcionarios obtuvieron esa información, ni qué rol específico habrían desempeñado los agentes norcoreanos.
La agencia de seguridad surcoreana tiene un historial mixto en cuanto a la precisión de sus aseveraciones sobre lo que ocurre en el hermético país vecino. La agencia dijo que no podía confirmar lo que habrían dicho sus funcionarios ante los parlamentarios.
Malasia no ha acusado directamente a Corea del Norte de la muerte de Kim Jong Nam, pero anda a la busca de varios sospechosos norcoreanos entre ellos un diplomático de la embajada norcoreana en Kuala Lumpur.
Kim Jong Nam murió el 13 de febrero en el aeropuerto de Kuala Lumpur cuando dos mujeres le rozaron el rostro con una sustancia química. La policía malasia dice que el operativo pareció ser bien planificado y que las responsables fueron una mujer vietnamita y una indonesia. La policía dijo que identificó la sustancia usada como el agente neurotóxico VX y el ministro de salud de Malasia dijo que la dosis fue tan alta que causó «una parálisis fulminante» y tras 20 minutos, la muerte.
Fuentes policiales de Malasia dijeron que cuatro hombres norcoreanos le dieron a las dos mujeres el agente neurotóxico y huyeron de Malasia ese mismo día.
No queda claro si esos cuatro individuos son los mismos cuatro individuos mencionados por los funcionarios de inteligencia surcoreanos.
Corea del Norte ha criticado severamente la investigación realizada por Malasia y no ha reconocido que el fallecido fue el hermano de su líder.