Ciudad del Vaticano.- El Papa Francisco instó hoy a los fieles católicos a usar la Biblia de forma cotidiana como lo hacen con el celular: abrirla varias veces al día, leerla a menudo, meditarla y asimilarla.

Esto durante su bendición dominical con el Angelus, pronunciada desde la ventana de su estudio personal en el Palacio Apostólico del Vaticano y ante miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro del Vaticano.

“¿Qué pasaría si tratamos la Biblia como tratamos a nuestro celular? Si la lleváramos siempre con nosotros, o al menos el pequeño evangelio de bolsillo, ¿qué sucedería? Si nos volviéramos cuando nos la olvidamos: tú te olvidas el celular (…) ¡uh! ¡No lo tengo, vuelvo a buscarlo!”.

“Si la abriéramos varias veces al día; si leyéramos los mensajes de Dios contenidos en la Biblia como leemos los mensajes del teléfono… ¿qué sucedería?”, cuestionó.

Reconoció que se trata de una comparación “paradójica”, pero aseguró que debería hacer pensar porque si los fieles tuvieran “la palabra” siempre en su corazón, ninguna tentación los podría alejar de Dios ni ningún obstáculo los desviaría del bien.

Apuntó que así se sabría vencer las insinuaciones cotidianas del mal que están dentro y fuera de cada uno, además de ser capaces de recibir a los demás, especialmente a los más vulnerables y necesitados, y también a los propios enemigos.

Más adelante, puso a todos en guardia ante las “flechas venenosas del diablo” y ante el “falso atajo del éxito y de la gloria”.

Recordó que desde hace unos días los católicos viven la Cuaresma, “que es el camino del pueblo de Dios hacia la Pascua, un camino de conversión, de lucha contra el mal con las armas de la oración, del ayuno, de las obras de caridad”.