El edil de Atzitzintla, personal del ayuntamiento, policías municipales y pobladores entre los 87 detenidos por la ejecución de los tres agentes de la Fiscalía de Secuestro y Delitos de Alto Impacto (Fisdai), agenciada a la organización criminal de El Buchanans.

En rueda de prensa el secretario General de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano, detalló que el operativo denominado Encrucijada permitió la detención de las 87 personas, entre ellas 5 mujeres y dos menores de edad, con apoyo de Gendarmería, Marina Armada de México y las corporaciones estatales.

Todos ellos, detalló que todos participaron para alertar al grupo criminal sobre la presencia de los agentes de secuestros, derivando en su ejecución en San José Cuyachapa, perteneciente a Esperanza.

En el fuerte operativo desplegado en La Encrucijada, perteneciente a Palmar de Bravo, Cuyachapa y Atzitzintla, participaron 500 elementos, con la baja del elemento de Gendarmería que murió tras ser impactado por el vehículo blindado Rinho de la Policía Estatal que se incendió sobre la autopista Puebla-Acatzingo.

El fiscal del estado, Víctor Antonio Carrancá Bourget, dijo que los agentes de la Fisdai investigaban una serie de secuestros en la región, siendo el más reciente el de una joven de la que abusaron sexualmente, cuando los policías municipales de Atzitzintla alertaron de su presencia al comando armado que llegó a privarlos de la libertad.

Puntualizó que entre los detenidos se encuentran las personas que ejecutaron a los agentes, aunque el líder de nombre Roberto apodado El Buchanans, logró escapar, siendo la segunda ocasión, pues de manera reciente personal de la Seido de PGR realizó un operativo en la zona sin éxito.

Durante la intervención fueron aseguradas 21 armas de fuego, 3 granadas de fragmentación, uniformes tácticos y equipos de radiocomunicación, así como vehículos blindados, algunos de lujo y otros para transportar hidrocarburo robado.

Lo anterior porque dicho grupo criminal de Los Zetas tomó el control de los actos delictivos de la zona, generando una serie de hechos violentos para terminar con pequeñas bandas criminales.