El Consejo de Organismos Empresariales (COE), advirtió que con la delincuencia no se negocia en torno al “huachicol”, postuló se mantenga el combate frontal y descartó inversiones en la zona en tanto no se restablezca el orden público.
El presidente del COE, Francisco Romero Serrano, evidenció que mientras el crimen organizado siga mandando en la llamada zona del “huachicol” de plano no se considera detonar inversiones en la zona que generen empleos para recuperar a jóvenes hoy ocupados por la delincuencia dedicada a la ordeña de combustibles.
Se pronunció porque se peine la zona tanto por Ejército y la Marina, como por otros cuerpos de seguridad, para evitar prevalezca el caos e inicie la aprehensión y procesamiento de involucrados.
Mientras, el vicepresidente del COE, Cesar Bonilla Yúnes, consideró propicio que las autoridades desarrollen un monitoreo de producción y venta de gasolinas, con miras a ubicar donde hay volúmenes “excedentes” que reflejen la operación del “huachicol” y sus eventuales vendedores y compradores.
Postuló que el Instituto nacional de Estadística y Geografía (INEGI) puede desarrollar y publicar esa base de datos como “gran auditor” y compartirla para fijar los nichos de ilicitud.
Palmar de Bravo, Santa Rita Tlahuapan y Texmelucan son algunas de las localidades con mayor presencia de tomas clandestinas, añadió, al pedir que el combate frontal “no sea una llamarada de petate”.
Consideró que Petróleos Mexicanos debería suspender el suministro de combustibles en ductos que cruzan la zona del huachicol como un primer paso, generar otros canales de abasto y vigilancia,
