Con motivo del Día Mundial del Consumidor, la Profeco Hidalgo difundió los siete derechos básicos que debe conocer la población para hacerlos valer en defensa de su economía.
“Consumidores somos todos y tenemos derechos”, recordó el delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor en Hidalgo, José Alberto Chávez Mendoza.
El funcionario calificó como de suma importancia el que la población conozca los “7 Derechos Básicos del Consumidor” y los haga valer, sustentándose en las garantías esenciales que le brinda la Ley Federal de Protección al Consumidor.
El primero de estos es el Derecho a la Información, es decir, a recibir del proveedor todos los datos necesarios para que pueda efectuar una compra consciente del producto o servicio que está adquiriendo.
Se tiene también el Derecho a la Educación, es decir, a tener conocimiento de que existe la Ley Federal de Protección al Consumidor, herramienta que vela por los interés de los mexicanos y da seguridad jurídica en la relación entre consumidores y proveedores.
Un tercero es el Derecho a Elegir; a saber que nadie puede presionar o condicionar la compra de un producto o la contratación de un servicio.
El Derecho a la Seguridad y la Calidad asgura que los bienes y servicios deben cumplir con las normas de seguridad y calidad, además de especificar las advertencias necesarias; así como las recomendaciones de uso.
Existe además del Derecho a no ser Discribinado; todo proveedor debe brindar un trato equitativo, igualitario y justo a los consumidores sin importar sexo, raza, religión, condición económica o de cualquier motivo similar.
Pero además existe el Derecho a la Compensación, es decir, a recibir soluciones justas por demandas justas, incluyendo la compensación por bienes mal hechos o bonificación por servicios insatisfactorios.
Finalmente se citó el Derecho a la Protección, que refiere que la Profeco protege la salud de los consumidores, y junto con las autoridades defienden los derechos a partir de la aplicación de las leyes.
El Día Mundial del Consumidor conmemora el discurso dado por el Presidente John F. Keneddy para reconocer al consumidor como un elemento fundamental dentro del proceso productivo, en el que enfatizó que “consumidores, por definición, somos todos”.