Derivado del programa “El mundo en llamas”, integrantes de la Escuela Soren Kierkegaard y del Instituto Lars Ulrik de Dinamarca, lamentaron las diferencias tan dispares, en comparación con su país, palpadas en las paupérrimas condiciones en que viven los mexicanos, asimismo, criticaron la escasa observancia de los derechos humanos y el impulso que se está dando a megaproyectos que atentan contra el medio ambiente y la supervivencia de comunidades indígenas.
 
Lo anterior en rueda de prensa encabezada por Jergen Pedersen, Luka Nielsen, Sofie Jensen y Morten Hansen, profesores y alumnos de las instituciones arriba mencionadas, acompañados por el presidente de la Comisión de Derechos Humanos y Laborales del Valle de Tehuacán, Martín Barrios Hernández y el dirigente del Movimiento Agrario Indígena Zapatista (MAIZ), Omar Esparza.
 
Las diferencias son muy amplias entre uno y otro país, en Dinamarca el estándar de vida es alto pero no es así porque el gobierno lo haya concedido, sino porque a ellos, como sociedad, les ha costado alcanzar y conservar esas transformaciones, señaló Barrios Hernández.
En cambio, en México muchas conquistas se están perdiendo, por ejemplo, en materia laboral, con la reforma del 2012, la del 2016 y la que está en puerta, prácticamente se destruirán todas las conquistas de la clase trabajadora, regresándola cien años en la historia, advirtió.
Por tal motivo, consideró importante que la gente vea cómo se vive en otros países, para que compare y se dé cuenta de que se puede vivir mejor, si se esfuerza y toma en sus manos la luchar en pro de un cambio, porque hoy, es una realidad la vigencia de listas negras, los despidos por organización, entre otros muchos atropellos cometidos en agravio de los trabajadores.
 
Nielsen, por su parte, consideró que el cambio se tiene que hacer localmente, procurando la organización de las personas y luchando a la par de agrupaciones como la Comisión de Derechos Humanos y Laborales de Tehuacán y el MAIZ.