El gobernador del estado, José Antonio Gali Fayad, dijo que “no tiene caso” impulsar en Puebla una nueva reforma a la Ley de Agua del Estado que permita la privatización del servicio, aunque avaló el trabajo hecho por la empresa Concesiones Integrales para el suministro del vital líquido en la capital.
Más aún, afirmó que Concesiones Integrales no sólo ha garantizado el servicio de agua potable sino que ha invertido en infraestructura y contribuido a disminuir la deuda de 3 mil millones de pesos que heredó el exgobernador priista Mario Marín Torres.
«Nosotros heredamos en 2011 esa gran deuda en cuestión del agua, de 3 mil millones de pesos aproximadamente. Lo que se hace es poner un orden. Lo que se hace con la concesionaria es exigirle acciones para el suministro de agua para los tandeos en las diversas colonias», abundó.
La versión del mandatario estatal se da a unas horas de que el Congreso local desechó la reforma al artículo 12 de la Constitución local para privatizar el servicio de agua potable en la entidad, la cual desató la inconformidad de presidentes municipales al promover 14 controversias constitucionales ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Ante ello, el titular del Ejecutivo estatal aplaudió la “sensibilidad” de los diputados poblanos al echar abajo la iniciativa de ley e insistió en que el uso del agua “nunca estuvo en peligro”.