Ante la onda de calor prevaleciente en esta región, la Dirección de Salud Municipal  recomendó a la población no exponerse al sol por lapsos prolongados, a fin de reducir el riesgo de complicaciones por el denominado “golpe de calor”, mismo que afecta principalmente a niños, ancianos y personas obesas.
La dependencia, a cargo de Oscar González Ibarra, instó a tomar las medidas de precaución necesarias para evitar patologías asociadas a las altas temperaturas entre las que también figuran las enfermedades diarreicas agudas y la deshidratación o insolación.
Si bien se dio a conocer que  hasta el momento no se ha registrado ningún padecimiento derivada del ascenso del termómetro, se están reforzando las acciones preventivas en el afán de no lamentar la pérdida de vidas humanas.   

 

La temporada de altas temperaturas se estimó a partir de la primera semana de abril hasta la primera semana de octubre, precisándose que el golpe de calor representa un peligro para el organismo humano, es consecuencia de la exposición a temperaturas elevadas, afecta al exterior e interior del cuerpo y provoca disfunciones que van de simples a muy serias.

 

Entre los síntomas a considerar se mencionó: dolor de cabeza, sensación de fatiga y sed intensa, náuseas y vómitos, calambres musculares y convulsiones, sudoración abundante, cara congestionada, piel seca, caliente y enrojecida, así como alteraciones de la consciencia (somnolencia), respiración y circulación.