Moscú. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, recibió hoy en el Kremlin al secretario estadunidense de Estado, Rex Tillerson, en medio de la tensión entre ambos países a raíz del bombardeo de Estados Unidos sobre Siria en represalia por un ataque con armas químicas a civiles.
A la reunión también asistió el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, con quien Tillerson se entrevistó poco antes para aclarar sus diferencias sobre el conflicto sirio, informó el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, citado por medios locales.
La reunión entre Putin y Tillerson, que no estaba inicialmente en la agenda, tuvo lugar horas después de que Putin dijo que la relación de Rusia con Estados Unidos se ha deteriorado desde que el presidente Donald Trump asumió el poder hace tres meses y tras un encuentro entre los jefes de las diplomacias de las dos potencias.
En el encuentro ministerial, Lavrov dejó claro a Tillerson que Rusia no aceptará un nuevo ataque de Estados Unidos en Siria, como el lanzado el viernes pasado en represalia por un ataque con gas sarín contra una localidad rebelde en la provincia de Idlib.
Según Lavrov, la reunión con Tillerson fue productiva y sincera, a pesar de los intentos de socavar los nexos mutuos de Rusia y Estados Unidos. “Cuando Moscú y Washington cooperan todo el mundo gana”, declaró a la prensa al término de la reunión Putin-Tillerson.
En el mismo sentido se manifestó Tillerson, quien calificó como productivo su encuentro con Lavrov y Putin. “Hemos hablado de las relaciones bilaterales, en este momento cuando hay un nivel bajo de confianza, sin embargo coincidimos en abrir los canales de comunicación, sobre todo respecto a Siria.
Se trató del segundo encuentro entre los titulares de Exteriores de Rusia y Estados Unidos tras una reunión en febrero pasado en la ciudad alemana de Bonn, primera desde que Tillerson asumió como secretario de Estado.
El jefe de la diplomacia estadunidense llegó la víspera a Rusia con el objetivo de convencer al gobierno ruso que cese su apoyo al régimen del presidente Bashar al Assad, tras el ataque químico de la semana pasada que dejó al menos 84 muertos y más de 500 heridos, sin embargo el Kremlin dijo que esa opción era «absurda».
Lavrov pidió a Estados Unidos no poner a Rusia en la “falsa disyuntiva” de elegir entre su alianza con Siria o con Estados Unidos.
El Kremlin tachó de «absurdo» dejar de apoyar a Al Assad, como le exige Estados Unidos, porque sería renunciar a la lucha contra el Estado Islámico (EI) y otros grupos terroristas que actúan en Siria.
«Nos parece corto de miras plantear la necesidad de distanciarse de Al Asad sin recordar los dos objetivos principales», que son la lucha contra el terrorismo y el arreglo político de la crisis siria, resaltó.