París. Todos los aspirantes a la presidencia de Francia, y todo el pueblo francés, son blancos potenciales de un ataque, dijo el miércoles la candidata de ultraderecha Marine Le Pen.
Los contendientes en la primera ronda de las elecciones presidenciales, que se celebra el domingo, reforzaron su seguridad en los últimos días. Las autoridades anunciaron el martes la detención de dos presuntos radicales islamistas que estarían preparando un ataque cerca de los comicios.
Aunque la fiscalía no ha identificado a sus posibles objetivos, Le Pen dijo a la televisora BFM: «Todos somos objetivos. Todos los franceses».
La líder de ultraderecha defendió también su decisión de obligar a la cadena nacional de noticias TF1 a retirar una bandera europea durante una entrevista el martes por la noche. «Soy candidata en las elecciones de la república francesa», dijo Le Pen apuntando que Europa está actuando como «enemiga» de Francia.