La Secretaría de Salud del estado de Puebla no tiene pruebas que confirmen que la población que vive a la orilla del río Atoyac está enfermando de cáncer y tampoco ha recibido ningún reporte de la ciudadanía, aseguró su titular, Arely Sánchez Negrete.
Por ello, dijo que si es necesario la dependencia buscará acercamiento con los habitantes que han denunciado que tienen algún familiar enfermo a causa de los altos niveles contaminantes del afluente.
Señaló que el gobierno del estado atiende en este momento la recomendación que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por el alto grado de polución en el cuerpo de agua, por lo que se estudiará también el tema de las supuestas enfermedades entre los habitantes.
“No tenemos todavía algún caso que se haya diagnosticado por contaminación del río Atoyac, tenemos la recomendación que nos llegó de Derechos Humanos, la cual estamos trabajando, hemos girado oficios a las secretarías competentes y la secretaría de Salud es una de las más involucradas en este tema. Estamos muy al pendiente para ver si existen algunos contaminantes que estén incidiendo directamente en las enfermedades de la población poblana”, declaró en entrevista.
La Asociación Dale la Cara al Atoyac acusó que el agua de este río es causante de cáncer en niños, mientras que la Conagua y la Cofepris reportaron que la mortalidad en los municipios de Puebla y Tlaxcala que se ubican en la rivera del Atoyac ha superado la media estatal en ambas entidades; análisis detectaron la presencia de sustancias tóxicas como tolueno, benceno y xilenos, las cuales están relacionadas padecimientos como leucemia mieloide.
Todos estos estudios fueron incluidos en la recomendación de la CNDH a los gobiernos de Puebla, Tlaxcala y sus municipios para que tomen acciones en el saneamiento del Atoyac y en 6 meses informen cuáles han sido las estrategias y programas que han llevado a cabo.
Al respecto, la secretaria de Salud comentó que la pasada administración no dejó documentado ningún caso relacionado con problemas de salud provocados por el Atoyac.