A poco más de un año de haber iniciado funciones en Tlaxcala, la escuela Robótica Educativa de Tlaxcala ha logrado dar cobertura a poco más de 80 niños de diversas edades, en cada de uno de los cinco niveles que integran un curso de robótica con técnicas coreanas.

La directora del plantel ubicado en el municipio de Apizaco, Laura García Rodríguez, ofreció detalles de las actividades que se desarrollan a partir de la confección de prototipos de robots y que ha sido aliciente para los menores de edad para aportar orden en su vida cotidiana.

 

¿Cuál es la dinámica de la escuela Robótica Educativa de Tlaxcala?

“Nuestro curso consta de 16 sesiones en cuatro meses, nuestras clases son secuenciales, en el segundo nivel ya empiezan a programar por computadora. En cada sesión los estudiantes ya arman un robot, hay casos de quienes ya han armado alrededor de 35 robots”.

En el instituto de reciente creación en Tlaxcala existen niños de diversas edades, hay desde quienes aún cursan la educación preescolar hasta aquellos de nivel secundaria.

A través de una coordinación institucional, Robótica Educativa de México ofrece atención a niños de diferentes escuelas, entre ellas: Andrés Bello, Simón Bolívar, y el Centro Educativo Juan Luna Molina.

 

¿A la edad de sus estudiantes, es difícil armar un robot?

“No es difícil, las modalidades de armado de robots van desde seguidor de línea, zumo, bicicleta, polea, y helicóptero, los niños que están en la escuela arman un prototipo en cada sesión y ellos mismos van desarrollando sus capacidades, conforme van avanzando en cada uno de los cinco niveles.

Como chicos ellos necesitan pulir sus habilidades. Nosotros nos basamos en un modelo de aprendizaje coreano, en el que se trabaja mucho de manera organizada y en equipo”.

Actualmente un curso de robótica para niños se desarrolla en 16 sesiones durante un lapso de cuatro meses, y en el último nivel los alumnos deben desarrollar un prototipo original y de idea propia.

La maestra Laura García Rodríguez aclara que esta disciplina no es exclusiva para niños, pues actualmente se da cobertura hasta a 20 niñas en las diferentes instituciones en donde tiene presencia la escuela de robótica.

 

¿Qué tanto interesa la práctica de la robótica en Tlaxcala?

“Interesa mucho, porque todos los alumnos van avanzando en cada uno de sus niveles. Estamos tratando de ampliarnos pero nos falta mucho porque es algo muy nuevo para ellos. Pretendemos tener las herramientas que ellos necesitan en sus vidas y la robótica aporta muchas de ellas”.

Dos de los estudiantes más avanzados de Robótica Educativa de Tlaxcala son Luis Enrique Moreno González y José Alejandro Hernández García, quienes se encuentran a punto de pasar al segundo nivel en donde ya aprenderán a programar en computadora.

 

Luis Enrique, ¿qué has aprendido en tus cursos?

“He aprendido a programar prototipos, motores y sus controles, a ver cómo funcionan y armar las piezas de cada robot. Yo tengo mucho interés por la robótica, no es algo que sea difícil”.

 

¿Cuál es el procedimiento para armar un aparato?

“Primero tienes que hacer tu inventario, contar todas las piezas e irte basando en los manuales que nos da el profesor. Luego observamos el circuito y programamos en una aplicación por computadora que se llama Sky Robo”.

Por su parte, José Alejandro Hernández García, de doce años de edad y estudiante del sexto año de primaria, se ve en unos años desarrollando prototipos de mayor envergadura, con base en el aprendizaje que ha desarrollado en un periodo de ocho meses.

 

¿Qué te atrae de la robótica?

“Me llama mucho la atención porque puedo armar cosas y es entretenido, realmente no me aburro. He logrado armar prototipos de diferentes tamaños y cuando sea grande me gustaría aprender robótica”.

 

¿Cómo llevarías a la vida cotidiana el aprendizaje de robótica?

“Me gustaría desarrollar un prototipo que me ayude en los quehaceres de la casa, como barrer o trapear”.

Ambos estudiantes mostraron para Síntesis el aprendizaje obtenido a la fecha, y en menos de 10 minutos ya habían armado la mitad de un artefacto de pequeñas dimensiones.

La escuela Robótica Educativa de Tlaxcala pretende ampliar su cobertura derivado de la amplia demanda que han tenido de padres de familia que desean inscribir a sus hijos en los cursos escolares, independientemente de aquellos que se ofrecen en instituciones privadas.