Tehuacán. La Unesco convocó al Museo del Agua “Agua para Siempre” para encabezar la fundación de una red mundial que se propone unir fuerzas y experiencia acumulada para difundir los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible, promulgados por la Asamblea General de las Naciones Unidas, y procurar su cumplimiento durante el período 2016-2030.

Así lo anunciaron Gisela Herrerías Guerra, directora de dicho centro de educación ambiental y Raúl Hernández Garciadiego, director general de Alternativas y Procesos de Participación Social AC, ganador del programa Iniciativa México (Imx) 2010 e impulsor del proyecto: “Agua para siempre”.

A través de un comunicado, los declarantes precisaron que en la integración de la referida red mundial se prevé la participación de 18 países, de los cinco continentes, con la intención de cumplir con el Objetivo 17 que consiste en crear alianzas para alcanzar la meta fijada.

Recuento

Tras casi dos décadas de acumular experiencia, promoviendo el desarrollo regional sostenible, en 1999 se creó el citado recinto, posicionándose como pionero mundial en educación ambiental para el desarrollo sostenible.

Está ubicado en el municipio de San Gabriel Chilac, dentro de la Reserva de la Biosfera Tehuacán-Cuicatlán (RBTC), zona mundialmente famosa por ser centro de origen de la agricultura mesoamericana, donde se domesticó el maíz, el frijol, el amaranto, la calabaza, el chile y otros cultivos que forman el núcleo de la alimentación mexicana, reconocida por la propia Unesco como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.

En el espacio se presentan los sistemas más valiosos de conservación del suelo y de captación y aprovechamiento de agua, mismos que tienen sus antecedentes más antiguos en el complejo Sistema de Purrón.

A lo largo de su historia, el museo ha organizado 2 mil 200 actividades educativas, enriqueciendo la conciencia ambiental de 215 mil personas, lo que permitirá enriquecer las acciones para alcanzar los 17 objetivos mundiales propuestos que incluyen contar con agua limpia y saneamiento ecológico para cuidar la salud y mantener limpio el ambiente; consumir una alimentación nutritiva y balanceada, preparada con prácticas higiénicas para combatir la malnutrición, así como crear innovaciones metodológicas educativas, organizativas y tecnológicas en procesos y equipos para generar empleos dignos y empresas sociales competitivas para superar la pobreza, concluyeron.