Dado que el rol de la mujer ha cambiado y en los últimos años se ha convertido en jefa de familia, se presentó una iniciativa para equiparar a las mujeres con los varones y que éstas tengan la posibilidad de heredar su apellido en igualdad de condiciones, siempre y cuando ambos padres estén de acuerdo.
La propuesta que modifica el Código Civil Federal, explicó el senador Roberto Albores Gleason, establece que en caso de no existir acuerdo en el orden de los apellidos entre los progenitores o quien este facultado para nombrar al menor, se mantendrá en primer término el apellido paterno.
El registro civil en México se ha regido por un carácter y una conducta paternalista, mismos que se han visto reflejados en el orden de los apellidos que se les ponen a los hijos, dando prioridad al apellido paterno y dejando en segundo plano el apellido materno. Esto únicamente obedece a una serie de prejuicios sociales que pretenden demostrar una situación de supuesta superioridad del hombre en el rol de la familia, indicó.
Esta visión de la familia ya no corresponde a la situación social actual en nuestro país pues según los datos recabados por el Inegi en la Encuesta lntercensal de 2015 señalan el papel creciente de la mujer en la vida económica y su rol como jefa de familia ha aumentado, dado que la tasa de participación económica de las mujeres con hijos es del 44.2 por ciento. La misma encuesta señala que el 24.8 por ciento de las mujeres con hijos ocupan el rol de jefas de familia en su hogar, revelaron.