José Antonio Gali Fayad, gobernador de Puebla, advirtió que utilizará la fuerza cuando sea necesario para frenar el robo de combustible en los municipios que integran el triángulo rojo, pues los huachicoleros corrompen la ley y afectan la tranquilidad de la sociedad.
“Yo soy un cuate que dialoga, que platica, porque esa es mi principal tarea, pero cuando el diálogo se termina y no hay un entendimiento…entonces con todo el peso de la ley”, señaló.
Entrevistado en el municipio de Cholula, el mandatario descartó que en Puebla se tenga que establecer un estado de excepción o emergencia por los efectos del combate al robo de combustible, y recalcó que las acciones de seguridad están firmes.
“No, el único que podría aprobarlo (estado de excepción) sería el Congreso de la Unión porque implicaría un toque de queda y el resguardo de todo el estado”, expuso Gali Fayad al rechazar también que el gobierno del estado vaya a ofrecer alguna recompensa por denunciar a líderes o bandas dedicadas a este ilícito.
Subrayó que los esfuerzos están encaminados a la coordinación con las distintas dependencias y áreas implicadas, desde la Sedena, la Secretaría de Hacienda, Pemex, y hasta la SCT y las policías del estado y municipales.
El jefe del Ejecutivo estatal adelantó que esta misma tarde encabezará una reunión de seguridad para conocer los avances de la investigación acerca del enfrentamiento entre militares y pobladores de Palmarito Tochapan. Y agradeció el apoyo del presidente Enrique Peña Nieto y del secretario de Gobernación federa, Miguel Ángel Osorio Chong, para atender el tema.
“Estoy muy agradecido con el presidente y con el secretario Osorio Chong por el apoyo para Puebla; hoy ya comenzaron a llegar los 2 mil elementos del Ejército, y también hoy por la tarde se realizará una reunión con la Sedena y el resto de las áreas para seguir con las acciones. No vamos a parar”, abundó.
Dijo que a pesar de la tensión que hoy existe por la constante explosión de las tomas clandestinas en ductos de Petróleos Mexicanos, el objetivo de su gobierno es “convertir el triángulo rojo en un triángulo de colores”.
