Atenas. A pesar de la lluvia torrencial, las protestas continuaron el jueves en Atenas por segundo día consecutivo, horas antes de una importante votación parlamentaria sobre austeridad que supondrá una pérdida adicional del poder adquisitivo de los griegos durante otros tres años.
Cientos de pensionistas marcharon hasta el parlamento cantando “No más robos de impuestos”.
Su protesta se produce un día después de que una huelga general afectó a servicios en todo el país. Los paros en marcha mantienen los transbordadores amarrados a puerto y provocaron estragos en el transporte público.
El primer ministro del país, el izquierdista Alexis Tsipras, busca que el Parlamento apruebe un recorte en las pensiones y subidas de impuestos hasta 2020, como parte del acuerdo con los acreedores internacionales para mantener los pagos del rescate, fundamentales para el país.
Aunque todos los partidos de la oposición se muestran contrarios a la propuesta, Tsipras confía en su mayoría de tres escaños en una cámara con 300 diputados. Hasta el momento, no se han anunciado disensiones.
