Lisboa. La policía portuguesa anunció el jueves la incautación de unas 10 toneladas métricas (11 toneladas de toneladas estadounidenses) de hachís en un barco que navegaba por el Mediterráneo, tras una investigación que se prolongó un año y en la que participaron cinco países y dos agencias paneuropeas.

La Marina y la Fuerza Aérea portuguesas colaboraron en la operación, al igual que la agencia de policía de la UE, Europol, y el Centro de Operaciones y Análisis Marítimo de Narcóticos, con sede en Lisboa y que incluye a siete países de la UE.

La droga se encontraba en 333 fardos y se trasladaba de un país norteafricano para distribuirla por otros países en Europa y otras regiones.

Dos ciudadanos portugueses y cuatro extranjeros fueron detenidos y estaba previsto que comparecieran ante un juez, señaló la policía.

En la operación participaron las autoridades españolas, francesas, holandesas y griegas.