Según la ley del Sistema Nacional de Seguridad Publica sí es causal de baja que un elemento policiaco no acredite sus exámenes de control y confianza, sin embargo la Secretaría de Seguridad Pública del estado analiza que mediante el Centro Estatal de Evaluación y Control de Confianza (C3) se especifiquen las condiciones generales de sus resultados.
Mauricio Delmar Saavedra, titular de la dependencia estatal reconoció en la necesidad de especificar en los resultados de evaluación del C3, el motivo por el cual los policías no acreditaron sus exámenes de control y confianza ya que no necesariamente puede ser por razones de delincuencia o crímenes.
Comentó que las evaluaciones consisten en diversos exámenes con distintas vertientes considerando aspectos psicológicos, económicos, toxicológicos, de salud, psicométrico y polígrafo, lo que indica que no necesariamente un policía no aprobado, está vinculado con algún hecho delictivo.
“No necesariamente un elemento que haya salido no aprobado significa que esté relacionado con delincuencia organizada… es un tema que estamos atacando para ver de qué manera lo podemos ajustar a la realidad… es ahí donde estamos ahorita viendo cómo vamos a proceder con las determinaciones del examen de control y confianza que dice aprobado y no aprobado”.
Dicha situación se analiza a nivel nacional comentó Delmar Saavedra ya que actualmente se maneja de forma confidencial las condiciones del porqué reprueban “es injusto dar de baja a un elemento por algunas pequeñas característica que pueden resolverse y que muchas veces la misma institución es responsable de ese resultado”.
Resultados del informe de evaluación de control de confianza al personal de seguridad con cierre al 31 de marzo del presente año, determinan que en Hidalgo el 17 por ciento del universo evaluable no aprobó sus exámenes, entre policía estatal, municipal, prevención y reinserción social y Procuraduría General de Justicia.
Finalmente el Secretario de Seguridad estatal apuntó en la necesidad de ampliar los exámenes de control y confianza hacia todas las instancias relacionadas con el ámbito de la seguridad pública, desde los altos mandos hasta las diversas instancias como el Poder Judicial.