La delegada de Gobernación en Puebla, Ana Isabel Allende Cano, propuso castigar hasta con tres años de prisión y aplicar una multa económica a aquellas personas que participen en actos de “rapiña” de combustible como ocurrió en Tlalancaleca.
Señaló que si se llega a registrar un hecho similar en otro municipio o localidad del estado, la autoridad debería actuar en consecuencia contra los habitantes que se vean involucrados en este delito.
Aunque aceptó que el gobierno se ve limitado cuando en el robo participan mujeres y niños, pues es casi imposible hacer uso de la fuerza pública. Uno de estos ejemplos es el de Tlalancaleca, donde fue visible la participación de madres y sus hijos quienes acudieron con garrafones y botellas para llenarlos con el combustible que se derramaba en un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Por tal razón, la funcionaria federal reiteró el llamado a la sociedad para que no arriesguen su vida y su libertad por estar al servicio de las bandas de huachicoleros.
“Las consecuencias son graves y si se hubiera actuado conforme a ley en estos momentos esas personas estarían en la cárcel», manifestó.
En cuanto a la reacción del gobierno estatal y federal, Allende Cano indicó que no fue el habitual o “cotidiano”, pero insistió en que esto se debió a la presencia de niños en el lugar de la toma clandestina.
“Es lamentable que las personas escudándose en que son de bajos recursos y que el petróleo es de los mexicanos, quieran hacer uso ilícito de este y arriesguen hasta a sus hijos”, opinó.