Un total de once docentes han realizado su cambio de orden de adscripción en la zona del «Triángulo Rojo», esto al ser amenazados verbalmente; otros 10 se mantiene a la espera para ser transferidos a otras zonas.
El secretario de la Sección 51 del SNTE, Jaime García Roque puntualizó que se encuentran preocupados por la situación que prevalece en los municipios de Palmar de Bravo y Quecholac, sin embargo aseveró que ningún niño se quedará sin clases.
Destacó que cada una de las solicitudes de maestros que buscan su cambio se ha analizado y solo once fueron aceptadas esto porque los docentes recibieron amenazas verbales de gente involucrada en el robo de hidrocarburos, «ninguna agresión ha sido física, todas han sido verbales y la mayoría por el temor que existe entre los maestros».
García Roque manifestó que aún tienen 10 solicitudes de docentes que estarán analizando y en breve esperan tener una respuesta a los interesados, «no podemos dejar a los niños y jovenes sin clases, hasta que lleguen los docentes de nuevo ingresó se darán los cambios pertinentes».
Externo que de manera conjunta sección 51 y 23 así como diferentes coordinaciones y la Secretaría de Educación Pública han celebrado cuatro reuniones para buscar estrategias para brindar mayor seguridad a los maestros que labora en la zona.
Además informó que instituciones del turno vespertino estarán adecuando sus horarios escolares a fin de salir más temprano y evitar algún suceso que ponga en peligro al colectivo docente.