Con temas como el espionaje, que ha comenzado a tomar fuerza en todos los sectores y foros, hace pensar a la mayor parte de la población que lo más seguro es que en breve haya algo más siniestro de fondo, porque ocurre lo mismo que cuando se dice con bombo y platillo que no van a subir los previos de las gasolinas y alimentos, y días después sucede totalmente lo contrario.

Lo cierto es que esas cosas solamente las dice el tiempo, ya que lo cierto en estos instantes es que el espionaje, está cobrando y va a cobrar mayor fuerza, pese que hay sectores principalmente el político, donde saben que el espionaje es el pan de cada día de quienes desde algún cargo de poder pretende no perder detalle de lo que hacen dicen y preparan sus oponentes, ya que ante la falta de trabajo y resultados prefieren adoptar sistemas que les permita según dicen, vigilar a determinados personajes para después convencerlos de alguna maneta que tienen que cambiar de opinión ya sea por las buenas o las malas.

Algunos de los mal y peor pensados que no quieren desaprovechar este foro y los reflectores que atrae, a pesar de que saben que siempre ha habido mecanismos para conocer hasta por adelantado lo que hacen grupos opositores a los sistemas en turno, de repente se dicen totalmente conocedores de la manera en que se opera para poder tener vigilados a sus “enemigos”, para poder ejercer un control que permita disuadir todo acto de inconformidad que a las autoridades en turno les pueda causar algún tipo de incomodidad.

Pero tampoco se puede pasar por alto que también hay casos de personajes que ahora se quejan y que pertenecieron al sistema oficial en algún momento, por lo que ahora pueden dar santo y seña de la manera en que se puede seguir de cerca los pasos de quienes en determinado  momento pueden resultar incómodos para poner en marcha programas o proyectos de grupo o de partido, y que pueden quitarles incluso el poder que han logrado.

Algunos de los más atrevidos sobre el tema, afirman que el espionaje no es nada nuevo ni desconocido, lo que sí nada se sabe son sus alcances, dadas las condiciones de las nuevas tecnologías que permiten que por medio de un aparato celular no solamente pueda ser rastreada una persona sino incluso escuchada y grabadas sus conversaciones como se ha dado a conocer en diferentes ocasiones al filtrarse pláticas entre políticos que ya no sirven al sistema, y que de esa manera se les hace muy fácil a un lado.

Lo cierto es que lo menos que se espera es que el tema tan añejo como muchos más, no sea parte de una estrategia para un nuevo anuncio de malas noticias, porque no se debe olvidar que hay gobernantes que antes de dejar los cargos donde se sintieron dioses o todo poderosos, adoptaron por mucho tiempo estas formas de entretener a la población para que una vez confundida se le den las malas noticias, aunque  algunos especialistas aseguran que la población ha demostrado a inicio del año en curso que ya no está dispuesta en dejarse sorprender.