Un legislador ruso calificó el martes la advertencia de Estados Unidos sobre un posible ataque con armas químicas en Siria de “provocación”.

En una advertencia al presidente de Siria, Bashar Assad, el lunes por la noche, la Casa Blanca mencionó pruebas “potenciales” de que Damasco se estaba preparando para otro ataque con armas químicas.

Assad ha negado su implicación en el ataque del pasado 4 de abril en la provincia de Idlib, controlada por rebeldes, en el que murieron docenas de personas y Rusia, el principal aliado del dirigente, salió en su apoyo. Días más tarde, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó lanzar un misil de crucero sobre una base aérea controlada por el gobierno sirio.

Frants Klintsevich, primer vicepresidente del comité de defensa y seguridad de la cámara alta del parlamento ruso, acusó el martes a Estados Unidos de “preparar un nuevo ataque contra posiciones de las fuerzas sirias”.

En comentarios a la agencia estatal RIA Novosti, agregó: “Las preparaciones para una nueva provocación cínica y sin precedentes están en marcha”.