México se inscribe entre los cinco países del mundo con mayor extensión de manglares, los cuales están distribuidos en los 17 estados costeros del país: Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa, Nayarit, Colima, Jalisco, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Campeche, Quintana Roo y Yucatán.
En el marco del Día Mundial para la Protección del Ecosistema de Manglar, el cual se celebra este 26 de julio, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) señala que después de Indonesia, Brasil y Australia, México se coloca en el cuarto sitio entre los 125 países y territorios que poseen este tipo de humedal.
Sus manglares, informó en un comunicado, representan el 5.0 por ciento del total mundial de este ecosistema anfibio que ocupa la zona intermedia de las mareas alta y baja de las costas en golfos, ensenadas, marismas y estuarios con fondos nunca rocosos.
Sin embargo, debido a que los manglares mexicanos sólo cubren el 0.4 por ciento de la superficie del país, es esencial protegerlos, toda vez que las granjas camaroneras, marinas, puertos y desarrollos inmobiliarios ponen en riesgo su sobrevivencia.
Los ecosistemas de manglares son vitales para el bienestar, la seguridad alimentaria y la protección de las comunidades costeras de todo el mundo.
Por ello, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) proclamó el 26 de julio como Día Mundial para la Protección del Ecosistema de Manglar que oficialmente se festeja desde 2016.
En México una importante superficie de manglar ha sido afectada de forma indirecta por obras de infraestructura que han alterado los flujos hidrológicos, como presas, bordos, canales y dragados, a lo cual se suman fenómenos naturales como los huracanes que contribuyen con su destrucción.
Esta situación ha obligado a las autoridades a pensar en qué debe hacerse en distintos niveles y con muy diversos actores para revertir el proceso, y qué medidas se deben tomar para detenerlo.
De ahí que la Comisión Nacional Forestal (Conafor) propone revertir el deterioro de los manglares a través de su reforestación, rehabilitación y restauración.
Para ello puso en marcha dos proyectos, los cuales se han implementado en Oaxaca, uno en Ventanilla, municipio de Santa María Tonameca, donde el huracán Paulina devastó el manglar, y otra en Cerro Hermoso, municipio de San Pedro Tututepec, en el Parque Nacional Lagunas de Chacahua, área afectada por un crecimiento poblacional acelerado.
Por otra parte, el 28 de octubre de 2016, la Semarnat anunció una inversión cercana a 132 millones de pesos para la restauración de los manglares en los estados de Nayarit, Campeche, Oaxaca, Quintana Roo, Sinaloa, Tabasco y Veracruz.
La dependencia refirió que ha restaurado cinco mil 414 hectáreas de humedales de 2013 a la fecha, con una inversión federal de 170.98 millones de pesos.