El gobierno de Estados Unidos impuso el lunes sanciones financieras contra el presidente de Venezuela Nicolás Maduro, luego de que el fin de semana se realizara la elección de una Asamblea Constituyente que le da a su partido poder prácticamente ilimitado.

Las sanciones congelan cualquier activo que Maduro pueda tener en jurisdicciones de Estados Unidos y prohíbe a los estadounidenses a realizar negocios con él. Las penalizaciones fueron delineadas en un breve comunicado de la oficina para el Control de los Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, antes de que se realizara un anuncio de la Casa Blanca por parte del asesor de seguridad nacional del presidente Donald Trump, H.R. McMaster, y del secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.

McMaster describió los comicios para la creación de una asamblea que reescribirá la constitución venezolana como una ?indignante toma del poder absoluto? que ?representa un golpe muy serio a la democracia en nuestro hemisferio?.

?Maduro no solo es un mal líder, ahora también es un dictador?, declaró McMaster.

No quedó esclarecido de inmediato el impacto monetario de las sanciones, debido a que las pertenencias de Maduro en jurisdicciones de Estados Unidos, en caso de que las tenga, no se han hecho públicas. Sin embargo, es rara la imposición de sanciones a un jefe de Estado y pueden contar con un poder simbólico que abriría las puertas a medidas similares de otros países. Por ejemplo, Estados Unidos tiene castigos vigentes desde 2011 contra el mandatario de Siria, Bashar Assad. Otros jefes de Estado que actualmente están sujetos a penalizaciones de Estados Unidos incluyen a Robert Mugabe de Zimbabue y a Kim Jong Un, de Corea del Norte.

Las acciones del lunes se presentan después de que Estados Unidos amenazara la semana pasada con sancionar a Maduro y a su gobierno socialista en caso de proceder con la elección del domingo. La oposición venezolana dijo que los comicios son una toma de poder.

?Al sancionar a Maduro, Estados Unidos deja en claro su oposición a las políticas de su régimen y nuestro apoyo al pueblo venezolano que busca regresar a su país a una democracia total y próspera?, dijo Mnuchin.

El secretario del Tesoro advirtió sanciones adicionales de Estados Unidos contra aliados de Maduro.

?Cualquiera que participe en esta (Asamblea Constituyente) ilegítima podría quedar expuesto a sanciones adicionales de Estados Unidos por su papel para socavar el proceso democrático y a las instituciones de Venezuela?, destacó Mnuchin.

Las autoridades han dicho que las sanciones podrían enfocarse en el sector petrolero de Venezuela, incluyendo posiblemente a la compañía petrolera paraestatal.

Pero después de que se realizara el anuncio, un funcionario dijo que el gobierno de Trump se abstuvo de sancionar al sector debido a las posibles complicaciones, incluyendo algunas que involucran a subsidiarias. El funcionario no contaba con autorización para discutir el tema de manera pública por lo que habló bajo condición de anonimato.

La Asamblea redactará una nueva constitución que, muchos creen, tiene el único objetivo de afianzar el poder cada vez más autoritario de Maduro. El lunes, el gobierno venezolano dijo que la elección le otorgó mandato popular para alterar el sistema político, pese a las extensas acusaciones de una baja participación electoral.

El gobierno de Trump no tardó en criticar las elecciones.

?La fraudulenta elección de Maduro es un nuevo paso hacia la dictadura?, dijo Nikki Haley, embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, en un mensaje en Twitter. ?No aceptaremos un gobierno ilegítimo. El pueblo venezolano y la democracia prevalecerán?.

La portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, dijo que la nueva Asamblea ?está diseñada para reemplazar a la Asamblea Nacional que se eligió de manera legítima, y socavar el derecho del pueblo venezolano a la autodeterminación?.